¿Lo viste?

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Muchos años atrás...

En la boca de una lluviosa noche,acontece un suceso atroz. Un hombre está siendo asesinado a apuñaladas por su hermosa esposa.La pelinegra, a sangre fría,sigue atravesando él cuerpo inerte de su ex esposo.
La mujer (ahora viuda)termina su acto apuñalándose justamente al corazón,
olvidando por completo al niño del otro lado del pasillo, en un cuarto, encerrado en un closet, siendo este atrancado con una silla. Mientras que por su pequeña cabecita pasan las emociones más fuertes que halla podido sentir  jamás , dejando atrás sus lágrimas de sollozos por un estado en shock.
Los policías al llegar al recinto pudieron decir que ese niño peli-negro no sufrió, pues él estaba en total calma cuando las autoridades llegaron a aquella casa. Algo raro ya que, lo que los hizo acudir al lugar, fueron las llamadas de vecinos que informaron terribles gritos desgarradores de un una mujer,un hombre... y un niño.

En la actualidad

-Doctor, el archivo-

-Gracias, un resumen rápido por favor-

-Trastorno bipolar, trastorno explosivo intermitente, junto con estrés pos-traumático, depresión, y episodios de ansiedad y delirios-

-ya veo, seria todo gracias-

la enfermera sale de aquel consultorio de aspecto de biblioteca antigua, todo el cuarto parece hecho de madera,se ve viejo y un poco deprimente pero Junto con aquel imponente hombre que está agachado viendo sus zapatos de charol negro relucientes, la escena se ve aun más aterradora, ahora que se sabe todo su historial, alguna escena macabra sale de la imaginativa mente de la joven enfermera.

-Muy bien joven Evans, cuénteme su día-

El joven, se endereza, se sienta recto en su asiento,lo ve y platica su día.

-Estuvo bien, me levante temprano, llegue a mi trabajo sin ningún problema, regresé a mi casa a comer, descanse un poco y después vine aquí-

-Puntual - Dice el doctor dándole una sonrisa de orgullo, el joven evita la sonrisa volteando hacia la ventana, El día se encontraba lluvioso y gris

-y soñé con ella otra vez...-

El doctor cambia a una actitud más seria.

-¿Y que fue lo que pasaba en el sueño?-

-La encontraba... me daba miedo, no ella, sino lo que sentía. Tenía tanto pensamientos positivos como negativos-

-Connor, estás en esta nueva ciudad para tratar de despegarte del pasado.
disfruta la vista, los lugares... relájate-

El doctor solo recibió un pequeño pero grave gruñido... Muy a su pesar, asiente con la cabeza.

-Okay, sería todo Evans, dejaremos las dosis como están.
Depakene, 2 pastillas al cada 24h
Risperdal, 2 pastillas cada 24h
Prozac, 1 pastilla cada 24h
Lamictal, 1pastillq cada 24h
Plenur, 1 pastilla cada 6h
Y si te sientes un poco...ummm, "ansioso", 1/2 de pastilla de diazepam cada 24h- termina el doctor viéndolo a la cara

El joven asiente calmado, se levanta y estrecha su mano con la del señor canoso.

-Nos vemos la siguiente semana- se despide con eso y sale de la habitación.

El joven de pelo negro camina entre los pasillos, mientras más se aproxima a la salida, escucha con más claridad unas voces femeninas

-¡Dios, ese hombre está como quiere!-

-Anna, no digas eso, el hombre es aterrador-

-Eso no le quita lo sexy que es, ademas, me vendría bien una relación apasionada- termina y saca una pequeña risa pícara

-Esa relación más bien tóxica, no pasaría, Connor se encuentra estable...-

El joven las mira sin más y se va, ellas sin poder creer que todo el tiempo las estuvo escuchando se sumergen en su mente y desaparecen por el pasillo.

El hombre sale del edificio y camina hacia la dirección en donde estacionó su carro, pero antes pasa a la pequeña cafetería que se encuentra por esos rumbos.

Pov Payton

La campana de la puerta suena, dando a entender que alguien acaba de entrar. Yo sigo con lo mío, llevo los capuchinos a la mesa de dos chicas

-mira a aquel hombre- se le escucha murmurar a una de las chicas. Mientras yo le tiendo el capuchino a la que habla.

-Oh mi dios, está guapísimo-la otra le responde asombrada, yo les dejo el otro capuchino en la mesa.

-Creo que nos escuchó, está volteando hacia acá- cuchichea la otra

-Aqui tienen, ¿les ofrezco algo más?-pregunto con una sonrisa

-No, puedes irte- dijo una de ellas sin voltearme a ver

Con mi molestia oculta me retiro hacia la barra para dejar la charola

-Pay,¿por qué sigues siendo tan amable con ellas?, son unas odiosas siempre que vienen- Pregunta mi amiga con expresión molesta, yo me río por su cuestión

-¿será porque no quiero perder mi trabajo?-le respondo con una sonrisa

Ella frunce el ceño-¡Al diablo!, son unas groseras-

-Mary, solo trato...- ella me calla de sopetón

-mejor ve a atender al mirada intensa ojos locos, nos ve desesperado.- volteó y si...

Un hombre de aproximadamente 30 años, fornido, alto, de piel blanca, pelo negro azabache , con unos ojos muy fuera de lo común,grandes almendrados color ámbar/casi amarillos. Acompañados de unas cejas y pestañas pobladas, nariz recta sin ser demasiado grande o chica. Tiene un ligero rubor rojizo, y unos labios del mismo tono, rojizos normales pero algo imnotizante. Mandíbula marcada pero sin llegar a ser exagerado junto con lo sombreado de su barba.
Ese hombre si que es guapo, pero... me recuerda a alguien.

Dejando ese pensamiento de lado voy a atenderlo. Apresuro mi paso ya que su mirada me fulmina.

Mind Of A Sick PersonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora