La Vidente

72 8 5
                                    

Esa fue la peor noche, se me hizo súper larga, yo estaba deseando que amaneciera para poder salir de esa casa a pedir ayuda, por fin eran las 6 de la mañana.
Yo me vestí, en ese momento ni me preocupe por lo que tenía puesto, solo necesitaba ayuda.

Salí de mi casa rumbo a la ciudad pues cerca de la casa de mis papás está la vidente más famosa del país.

Después de un par de horas de viaje llegué a casa de la señora, pues como era de saberse habían muchos personas antes que yo, era muy popular y al parecer la gente estaba muy emocionada por saber su futuro.
Pasaron 30 minutos y por fin la señora me llamo.
Cuando fui a abrir mi boca para contarle me dijo
- Shhhh no digas nada -
Y yo obedecí y me quedé callada.
Ella me dijo
- No estás sola, vienes acompañada por una entidad muy pesada -
Yo la miré con cara de asombro y me dispuse a contarle lo que pasaba y quién era yo.

Lourdes: Bueno, mi nombre es Lourdes Quintero y estoy aquí porque necesito ayuda, ayer en la noche me desperté porque sentía una mirada clavarse en mí y ruidos raros en mi casa, y yo pues vivo sola es imposible que me pase eso, luego cuando baje al salón de abajo me encontré un niño con la cara desfigurado, era pálido. En fin era un espíritu y necesito su ayuda señora para saber que puedo hacer.

La señora vidente me dijo que primero necesitaba un amuleto de protección, y también una limpia en mi casa, para deshacerme de todos los espíritus malos y oscuros que rondan por mi casa.

Luego me respondió que no estaba sola del todo, que había el espíritu de alguien más conmigo,y ese no era malo, ese me estaba cuidando, me describió que era alto, tenía el pelo negro y era blanco, ahí me desplome a llorar ya lo había superado pero es imposible, yo lo respondí con la voz temblorosa.
- Señora ese es el espíritu de mi hermano -

La Casa Que No Debiste ComprarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora