❝Hybrid❀DongTa❞

❀5._

Luego de mencionar esas palabras Dong Han toma la cálida mano de Kenta para caminar hacia la salida del zoológico.

Las manos de Kenta temblaban, estaba nervioso, no sabía como reaccionaría Dong Han al saber lo que en realidad era, tenía miedo...mucho miedo de lo que el mayor diría y... si ¿También lo rechazaba?, el japonés no sabía que pensar.

Luego de pocos minutos Dong Han se encontraba sacando las llaves del bolsillo de su pantalón.

-Tan...rápido llegamos?-Murmura el bajito mirando al mayor hacia arriba

-Si, pequeño...vamos entra-Responde Dong Han haciendose un lado para darle paso al pequeño el cúal entra sintiendo sus piernas y manos temblar-Bien, pequeño...que es lo que tienes que contarme?

-Ah...sobre eso...donde está el baño, hyung?-Dice el japonés jugando con sus dedos mirando como estos temblaban debido a los nervios.

-Sigue por el pasillo es la tercera puerta-Dice el más alto y Kenta asiente caminando por el pasillo hasta llegar a aquella puerta, abre la puerta y entra cerrando por detrás.

-Bien...hagamos esto-Susurra Kenta y suspira antes de hacer aparecer sus orejas de gato junto a su cola, la cual no se notaba mucho ya que estaba con pantalones puestos.

Mientras Dong Han esperaba en la sala sentado en el sofá moviendo su pierna de manera repetitida.

-Hyung, cierre los ojos-Dice Kenta caminando lentamente hacia la sala.

-Esta bien, pequeño-Responde Dong Han aún más curioso al escuchar al menor.

El extranjero suspira de manera inaudible y se posiciona delante de Dong Han con su cabeza gacha.

-Ya...puedes abrirlos, hyung-Susurra y muerde su labio inferior.

Dong Han descubre sus ojos y juró ver a la cosita más tierna que alguna vez había visto, un Kenta con orejitas de gato, nunca se lo esperó de hecho siempre creyó que los híbridos eran criaturas mitólogicas, nunca se imaginó que existirían, pero ser amigo de uno de ellos es lo más genial que alguna vez le haya pasado.

-Yo...entiendo si...ahora ya no querrás ser mi...amigo-Murmura Kenta y talla sus ojos con sus manos

-Pequeño...te ves...adorable-Dice Dong Han con una gran sonrisa en sus labios y se levanta a abrazarlo fuertemente haciendo que el menor abra su boca sorprendido, no esperaba esa reacción de parte del mayor pero era lo mejor que había sentido en sus 18 años.

-No...dejarás de ser...mi amigo, hyung? -Susurra el japonés y se acurruca en el pecho del más alto.

-Claro que no, pequeño...te ves tan lindo más de lo que ya eres-Dice el mayor y guía su mano a una de las orejitas de gato del menor para luego empezar a acariciar esta escuchando como el pequeño soltaba pequeños ronroneos- Eso te gusta, pequeño?

-Si, hyung...-Susurra Kenta cerrando sus ojos solo disfrutando de las caricias que Dong Han proporcionaba en una de sus orejitas provocando que el chico alto sonríera enternecido.

-Pequeño...sientate-Dice Dong Han y toma a Kenta sentandose con el en sus piernas acunando al recién nombrado entre sus brazos mientras acaricia ahora ambas orejitas del menor-Me gusta más verte con orejitas.

-Pero...no puedo estar con ellas siempre, hyung-Susurra Kenta entre pequeños ronroneos.

-Lo estarás cuando vengamos a mi casa o vayamos a la tuya, pequeño-Propone Dong Han sonriendo y Kenta asiente levemente

-Mi...casa es muy pequeña, hyung-Susurra Kenta y suspira levemente jugando con sus dedos.

-En ese caso...pequeño...te gustaría venir a vivir conmigo aquí?, creo que ambos estamos muy solos-Dice Dong Han emocionado, hace mucho no vivía con alguién y necesitaba compañía, que mejor que hacerlo con Kenta.

-De...verdad, hyung?-Susurra el menor y sube su cabeza para mirar al de cabellos plateados.

-Si, pequeño...sería genial vivir contigo!-Exclama Dong Han sonriendo ampliamente mientras mira al mas bajito.

-Entonces...si quiero, hyung-Dice Kenta en un volumen un poco más alto de lo que siempre hablaba.

-Ahora mismo podemos ir a buscar tus cosas, pequeño-Dice Dong Han, estaba demasiado feliz.

-Si! Si! Vamos, hyung! -Exclama el japonés y se levanta de sus piernas rápidamente.

-Vamos, pequeño-Dong Han toma a Kenta entre sus brazos y ya afuera comienza a caminar.

-Sigue derecho y doblas a la izquierda en la próxima calle, hyung-Susurra Kenta acurrucandose en el escondiendo sus orejitas entre su pecho ya que el mayor no le había dado tiempo para ocultar sus rasgos gatunos.

-Esta bien, Kenta estaremos allí en algunos minutos-Sonríe Dong Han mientras caminan.

[...]

Luego de varios minutos llegan al edificio, suben al apartamento y Kenta abre la puerta.

-No son muchas cosas, hyung...pasa-Luego de que Dong Han pasara, Kenta cierra la puerta por detrás y ambos van al pequeño cuarto de Kenta.

-Es pequeño pero acogedor, pequeño-Dice Dong Han mirando a su alrededor.

Ya en el cuarto, Kenta empieza a echar su ropa a un bolso, era lo único suyo en el apartamento lo demás lo había puesto el dueño del apartamento.

-Listo, hyung-Dice Kenta tomando un bolso grande entre sus manos.

-Solo eso, pequeño?-Responde Dong Han y Kenta asiente en respuesta.

-Lo demás es del dueño del apartamento, después de salir debemos ir a donde el dueño para devolverle las llaves y decirle que no rentaré más el apartamento-Dice Kenta asintiendo y sonríe de lado, el hecho de vivir con Dong Han lo ponía muy feliz.

-Esta bien, pequeño...como tu digas, vamos?-Dice Dong Han sonriendo.

-Sip, vamos!-Dice el japonés entrelazando su brazo con el del más alto para salir del apartamento.

-Y...donde vive el dueño?-Pregunta el mayor mirando al más bajito.

-Aquí-Kenta ríe apuntando una puerta de color blanco al igual que las paredes del edificio y el mismo toca la puerta.

Segundos después abre la puerta un señor de no muy avanzada edad.

-Buenas señor Jeong...vengo a informarle que ya no viviré más en su apartamente, aquí estan sus llaves y...deje todo ordenado, gracias-Dice Kenta de manera amable.

-Gracias a ti, Kenta y esta bien-Dice el señor tomando las llaves que el pequeño le tendía.

-Bueno, adiós, señor...muchas gracias-Sonríe de lado haciendo una reverencia.

Luego de eso ambos chicos se dirigieron a la casa de Dong Han, ambos con una gran sonrisa en su rostro.