Ya te habia olvidado...~Musa y Riven

Lo inevitable

Empezó a llover, bueno es hora de irse a casa, pensé asique cojí mi bolso y me fui a mi apartamento.
Al día siguiente me levanté, me duché y me vesti con una blusa blanca con un poco de escote, unos shorts y mis convers blancas, y finalmente me hice un moño.Iba sencilla pero muy mona.
No me corría prisa por ver a Riven después de lo que hizo asique decidí ir de compras, aunque nunca lo admita por llevarle la contraria a Stella, me relaja bastante.
Antes de ir al centro comercial pasé por una cafetería.
-Hola quería un café por favor-
-¿Para llevar?-dijo la dependienta.
-Si gracias-Cojí el café y al darme la vuelta un chico alto y fuerte se chocó conmigo tirandome el café encima.
No me lo podía creer, cuando le busco nunca le encuentro y cuando quiero olvidarme de el y no verle más siempre me lo encuentro.
-Ay dios Musa lo siento mucho, ven a mi apartamento y te la lavo...-
-No hace falta, ya la lavaré-dije apresurandome a la puerta.
El como siempre me agarró
-Por favor, te lo debo-
-Bueno vale pero sueltame-
Llegamos al apartamento y me quité la blusa, se la tiré para que me la lavara.
-¿Qué pasa? Parece mentira que no me hallas visto en sujetador-dije riendome
-Emm...voy a lavarte la blusa-y se fue apresuradamente.

Puse la tele y al rato vino Riven. Todo era muy incómodo y ninguno sabía que decir. Yo me estaba poniendo muy nerviosa porque Riven se había sentado a mi lado y no sabía que iba a hacer.
-Tenemos que hablar-soltó el de repente
-Si-
-Entiendo que estés molesta pero Musa yo me fuí para encontrarme a mí mismo-
-Bueno ¿y te encontraste Riven?-
-Musa me dí cuenta de que tu eres lo único que me importa-
No sabía como responder a eso, me quedé perpleja y, la verdad, es que tenía miedo por si se lanzaba.
-Quiero que volvamos a intentarlo Musa, yo te amo...-
-Sabes que no puedo hacerlo, yo ya he pasado página-
La verdad que estar en el apartamento de tu exnovio y en sujetador es la cosa más rara que me ha pasado en la vida.
Riven cada vez se acercaba más a mi y yo no podía echarme más para atrás, estaba atrapada.
-Se que estás deseando volver a besarme Musa, asique volvamos a intentarlo, los dos queremos, ¿cuál es el problema entonces?-
-Riven para-me levanté del sofá y me alejé de el.Me dirijía a la puerta
-La llave está echada, no tienes escapatoria nena-dijo sonrriente
Sabe que me encanta que me llame así y me se su truco pero no, no voy a caer.
Se acercó a mi y me abrazó por la cintura rozando sus labios por mi cuello.
-Riven- dije en un gemido sin quererlo.
-Musa-
Y pasó lo inevitable, se lanzó y nos besamos como nunca antes lo habíamos hecho, me apretaba los pechos mientras me daba besos en el cuello, me desabrochó el sujetador y me bajo los shorts, finalmente se los bajó el también y claro lo hicimos.