00

96 14 14
                                    

Algo dentro de ella le decía que todo esto estaba mal que debía dar dos pasos atrás y negarse rotundamente a lo que el chico frente a ella le estaba proponiendo.

No es como si fuera un gran trato.

—¿Qué gano yo si acepto?—Sus palabras salieron firmes pero sus piernas estaban temblando.

Llevaban no menos de treinta minutos hablando. Shawn la citó en la cafetería donde frecuentaban alegando que tenía algo importantísimo que comentarle y como siempre ella había tenido el mayor retraso posible, aunque eso no era lo que importaba ahora, lo que le importaba era el peso de todo lo que él le estaba pidiendo. Desde el principio su amigo se notaba nervioso, ni siquiera la había podido mirar a los ojos; a Baek eso le pareció increíblemente tierno.

—¡No lo sé!—Pasó las manos por su cabello frustrado.—¡Ya sé!

El chico aplaudió asustandola causando que regara un poco su café, ella lo miró interrogante evitando reír.

—Haré todas tus tareas por el tiempo que dure todo esto, y te ayudaré cuando tengas algún problema en matemáticas, y como tenemos que hacerlo ver real te llevaré a ver todas las películas que estén estrenando.—Alzó su mano en forma de promesa.

No sabes qué daño me haces.

No muy segura y tirando todos esos pensamientos negativos dio un pequeño sí con su cabeza, sus manos empezaron a temblar y agarró la taza de café con fuerza intentando ocultarlo.

Si mal no lo recordaba, Shawn había estado en su vida desde que cumplió seis años, desde ese momento se volvieron inseparablables creando así una amistad que crecía con el paso del tiempo. Sin embargo eso no fue lo único que creció junto con ellos, Baek comenzó a tener más que un simple amor de amigos hacia el castaño que ahora la miraba pidiendo misericordia haciendo que la chica sintiera que la cafetería era cada vez más pequeña.

—Por favor,—Shawn agarró su brazo desesperado—solo será un mes, o tal vez dos ya sabes lo obstinada que es.

Baek se soltó del agarre de su mejor amigo abriendo un poco los ojos ante la insistencia del chico. Era más que obvio que se estaba aguantando las ganas de llorar por los celos y todos lo sentimientos que chocaban ahora mismo en su interior, pero aún así aguanto  creyendo que podía ser más lista y utilizar ese favor para su beneficio. Shawn le estaba proponiendo algo grande, darle celos a Haz fingiendo que ellos dos eran una especie de pareja; Baek juró nunca haberlo visto tan encaprichado con alguien eso la hizo sentir aún más pequeña ante los ojos del chico.

—Agh, me hiciste regar mi café.—Suspiró, tratando de pensar positivo ante la situación.

—Lo siento.—Shawn la miró con ojos de perro regañado.—Anda, Baek... Por favor.

Mis expectativas se han elevado demasiado.

—Está bien.—Cerró los ojos.—¡Pero solo por un mes!

Baek no pudo alzar su dedo índice en forma de advertencia porque los brazos de Shawn estaban rodeándola.

—¡Gracias, gracias, gracias! Te prometo que seremos la mejor pareja falsa de toda la historia.

Flasa. Eso duele un poco, Shawn.

Baek sabía que nada bueno podría salir de esta situación y que en vez de que sus expectativas se cumplieran iba a salir con el corazón roto, más de lo que ya lo tenía. Pero aún si no lo hubiese hecho se sentiría fatal por haberle fallado al chico de sus sueños.

Ahora solo le quedaba esperar a que la vida por fin le jugara limpio.

[🎑]

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 16, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

actum//行為 ; s.mDonde viven las historias. Descúbrelo ahora