{ Siempre fuiste una persona muy sociable y de buen corazón. Por esa misma razón fue que no pudiste dejarlo tirado ahí. }
—¡Mueve tu trasero (T/N)! ¡Vamos a llegar tarde!— te replicó uno de tus amigos más cercanos, YoungKyun, mientras ibas viendo el paisaje con tranquilidad.
—Ve tú, yo ya llego— le respondiste a lo largo ya que el seguía caminando con prisa hacia el instituto. Asintió, y salió corriendo, tropezándose un par de veces, antes de salir de tu campo de visión.
Reíste para tus adentros viendo a tu amigo correr como desquiciado. Tu sonrisa se esfumó cuándo escuchaste unos sonidos de dolor y golpes, provenientes de un callejón del otro lado de la carretera. Querías poder ignorar esos sonidos de dolor, pero no pudiste.
Rápidamente cruzaste la calle para encontrarte con una escena no muy agradable. Un señor, alto, viejo y con un aura intimidante, y adelante de el, un joven, un poco mayor que tu quizás y no se podía ver bien su rostro, pero podías afirmar que había sangre.
Sacaste tu celular, marcaste el número de la policía y les avisaste lo que pasaba. Te interpusiste en la salida del callejón por lo cual el mayor te miro confundido.
—¿Qué quieres? ¿No ves que estamos teniendo un serio momento aquí?— gruñó el viejo. Tu solo tragaste saliva y asentiste, tratando de calmarte.—Quiero que lo dejes en paz— dijiste logrando tu cometido.
—y si no ¿Qué?— ésta vez solo le sonreíste —Ya llamé a la policía. Estás en problemas— te miró asustado cuando las alarmas de los carros empezaron a sonar.—¡¿Acaso eres estúpida?!— se acerco a ti con un objeto que te cegó por un momento. Te diste cuenta de que era una daga cuándo de hizo una cortada en la mejilla. Te alarmaste y te distanciaste de él.
Justo cuando te iba a atacar de nuevo varios policías armados agarraron a los tres por el brazo —Los tres vendrán con nosotros, chica llévalo con la ambulancia. Al viejo llévenselo al carro.— te dijo una policía mientras señalaba hacia la ambulancia.
Asentiste y te acercaste al cuerpo del joven, el olor a sangre te daba náuseas pero lograste acercaste a su pecho e intentar localizar su pulso. El cuál estaba débil pero seguía ahí. Suspiraste y te acomodaste para alzarlo. Pesaba un poco pero nada que no pudieras cargar.
Lo llevaste casi arrastrado a la ambulancia, en la cual lo pusieron en una camilla —¿Conoces a este joven?— te preguntó una enfermera a la cual le respondiste negando —No, pero ¿les molestaría si lo acompaño? Digo, para que alguien lo cuide por mientras.— la enfermera asintió y te ayudó a acomodarte en los pequeños asientos.
Le escribiste a YoungKyun para explicarle el porqué no llegarías:
Kyun🙌🏻
Yo
Kyun!Kyun🙌🏻
(Apodo)! Dónde estás?? Ya estamos en el receso y te he buscado en todos lados! Acaso te metiste en problemas????Yo:
Qué? Yo? Nunca...pero puede o puede que no le haya salvado la vida a alguien y ahora este de camino al hospital para hacerle compañía ☺️Kyun🙌🏻
...por que no me sorprende? Avísame cuando llegues al hospital, yo llego ahora, si?
No te metas en más problemas😑Yo:
Si, capitán! 🙆Después de esa corta y linda conversación apagué mi teléfono y lo guardé en mi bulto del colegio. Deteniéndome a observar a el joven al cual había ayudado.
_______________________________
ESTÁS LEYENDO
MAMMA MIA! » kang chani
Fanfiction©| BurnedScones Sus manos estaban marcadas con asesinatos, y sin embargo, confío en ellas por completo. ________________________________________ fanfic; kang chani x lectora。 → ¡NO SE PREMITEN ADAPTACIONES! ← → En edición