☆ Una cita y... (Momento Folden) ☆

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Foxy y Golden caminaban despacio comiendo nieve de sabores* mientras se reían fuertemente, no podían parar con los chistes malos y las burlas hacia los que pasaban frente a ellos y se veían ridículos, todos les miraban raro, como si tuvieran un virus contagioso o estuvieran locos de remate; pero a la pareja de -aún- amigos, no le importaba en lo más mínimo. Cuando sus estómagos comenzaron a doler de tanto esfuerzo, se detuvieron y se sentaron el el suelo para respirar y calmarse.

Pero en vez de que sus risas se apaciguaran como era la idea, siguieron explotando en carcajadas tremendas; tanto así que quedaron medio tirados en la hierba de aquél parque, uno al lado del otro, sin importarles la ropa y sólo retorciéndose de gracia, hasta que, al fin, las risas que parecían eternas, pararon.

Se miraron unos momentos con una enorme sonrisa en su rostro y un sonrojo comenzando a subirse a sus mejillas rápidamente; todo estaba tal y como Golden se lo había imaginado cientos de veces, Foxy estaba actuando bien, le estaba dando cumplidos y estaba haciendo bromas con él y no hacia él, hacía todo lo que no había hecho antes y eso le hacía sentir fabuloso; y Foxy se sentía bien, se sentía feliz, se sentía irremediablemente enamorado. Y lo odiaba, lo odiaba con toda su alma y, sobre todo, odiaba a Golden por haberle hecho sentir aquellas cosas tan odiosas.

―¿Qué miras? ―Preguntó serio al notar que Golden no apartaba la mirada, pero su sonrojo demostraba que, mas que molestarle, le hacía sentir avergonzado y ni siquiera entendía la razón de aquella vergüenza. Es decir, sólo era Golden, ese estúpido rubio al que odiaba por estar enamorado de chica. Odiaba, no odia. El contrario sonrió de nuevo. 

―A ti ―Respondió con simpleza mientras se iba acercando un poco más a su lado, arrastrándose suavemente para quedar con su cara muy cerca de la cara de su contrario. Foxy quiso desviar la mirada, quería alejarlo o alejarse, pero no podía, estaba como pegado al suelo, estaba hipnotizado por la mirada de Golden―. Foxy... Eres muy lindo.

Y Foxy le tiró un golpe en el hombro algo fuerte mientras se giraba para darle la espalda muy sonrojado, Golden se quejó un poco por aquella acción mientras se sobaba y se acercaba más al mayor, no quería perderse ninguna de las expresiones de Foxy ahora que se le declarara. Se sentó en el pasto, gateó hasta donde estaba su cara y tomó una de las manos del pelirrojo para llevarla a su pecho.

―¿Sientes eso? ―Foxy aún se negaba a mirarlo a la cara y su sonrojo se negaba a desaparecer de sus mejillas, pero con todo y todo, asintió despacio mirando a Golden de reojo―. Es lo que pasa dentro de mí cada vez que estás cerca mío. Foxy... Sé que nunca tuvimos una relación amistosa muy estable, sé que me odiabas y que peleamos demasiado por el amor de una chica que terminó estando enamorada de otra igual a ella, y todo esto... Dios, me cuesta tanto sacarlo.

Sus mejillas también estaban ardiendo y Foxy soltó una pequeña risita, mirándolo por fin; se veía muy adorable de esa forma, se veía vulnerable y tierno tratándo de explicarle algo que se le atoraba en el fondo de la garganta y, por un momento, sintió ganas de besarlo de nuevo, como ese día detrás del patio. Golden carraspeó y retomó la palabra, colocando su mano libre en la mejilla derecha de Foxy.

―Quiero decir... Y a pesar de todo ello, no pude evitar enamorarme de ti, no pude evitar fijarme en tus preciosos ojos ámbar, en tu hermoso cabello rojo, en tu adecuada altura, en todo lo que te hace ser Foxy y... Maldición, Foxy, no quiero estar ni un sólo minuto más lejos de ti, te necesito ―Sus palabras temblaban, sus manos estaban inquietas y sus ojos estaban fijos en los ojos de Foxy, y, oh, Foxy no podría sentirse más dichoso.

Su sonrisa se hizo imposible de esconder y su sonrojo se hizo aún más intenso y notorio; mierda, tenía tantas ganas de abrazar a Golden, tenía tantas ganas de tirarle al suelo de nuevo y besarle toda su cara para corresponder y que él riera. Pero lo único que pudo hacer fue tartamudear. 

―G-Golden... ―Acarició el dorso de su mano, esperando que entendiera lo que trataba de expresar, era obvio que le correspondía, había trabajado tan duro para enamorarlo... Iba a ser suyo, iba a pertenecer a Golden y Golden le pertenecería a él, como siempre soñó que sería. Al ver que éste no entendía, decidió armarse de valor y hablar suavemente―. Al final... Terminé correspondiéndote, maldito oxigenado. 

No dijeron nada más después de la ligera risa, no fue necesario hacerlo de cualquier modo, porque con su mirada se lo dijeron todo lo que habían estado callando, con las caricias que estaban dándose expresaban su infinito amor, y con la unión de sus labios sellaban la promesa de estar juntos.

Fue un beso suave pero no tímido, esta vez, Foxy tenía más confianza, más deseo, más ganas, más amor; y Golden estaba eufórico, excitado (y no sexualmente), embelesado por los labios del chico que más amaba en el mundo y, sobre todo, estaba perdidamente enamorado. Por el simple placer de hacerlo, Golden hundió los dedos en el pelirrojo cabello de Foxy, y él, a su vez, sujetó fuertemente a su contrario de las caderas; ah, que sensación tan adictiva. 

Se separaron cuando el aire empezó a escasear y se miraron fijamente, estaban sonriendo como estúpidos y sus mejillas estaban a punto de reventar por el sonrojo, ninguno dijo nada, sólo se levantaron del pasto y estaban por irse, pero antes de que nadie diese un paso, Golden tomó la mano de Foxy y le susurró:

―¿Quieres ser mi novio, Foxy? ―Tenía ganas de golpearlo y, de hecho, sí lo golpeó suavemente en el hombro, ¿de verdad le preguntaba aquello después de lo que había pasado? Ya recordaba por qué odiaba a ese rubio. 

―No lo sé, déjame pensarlo ―Se burlo a la par de que Golden hacía un puchero y ahora sí emprendieron marcha―. Claro que sí, tontito. 

Felicidad, esa era la única palabra en el diccionario de Golden ahora, y estaba ultra ansioso por contarle a sus amigos sin importarle nada. Sin siquiera saber que F estaría leyéndolo todo con un gran dolor en el pecho. 

Pero daba igual, ¿no? Después de todo, Golden necesitaba a Foxy.

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Este es el cap más largo hasta ahora lololol y de hecho era más largo, pero mejor lo divido en dos uvu ¿qué les parece? EuE
Esto me dolió y a la vez no, ay :'v esperen el siguiente la semana próxima para ver el desenlace GGG.
Ya saben, denle lof con estrellita y comentarios, sisisiis
Los amo, gracias por leer ♡

-Dennis

*Nieve de sabores: Es como helado aquí en México, pero es más denso :P

❝Lo necesitas a él❞「Golddy」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora