Poesías en vacíos depresivos.

Vista

Nos vemos en un portal inmenso de fantasías e ilusiones, aquellas se ven convenientes y otras pasajeramente difusas en nuestra vida.

Vistas rayadas de ríos vagabundos, de aquellos en los que no se puede flotar la mínima lancha, pero que si lo hace, se captura hasta el más mínimo recuerdo de la vida, se absorbe el tiempo, los años, y hasta las ganas de seguir navegando, remando y simplemente viendo los azulejos de muerte.

¿Vista, observación, detenimiento, curiosidad?
¿Que hace que uno defina el vacío efímero?
¿Qué provoca que tus ojos vean a otras montañas?
Dime.. ¿cuánto tiempo necesito seguir viéndote para que puedas ver mis lagunas y mis cuevas más profundas?

A veces me considero alguien con vendajes, Alguien al que le impidieron el poder ver sus raíces, sus venas de derrotas y victorias, sus sacrificios en vano y sus huellas en tempestades.

Vemos todo pasar, nuestros años haciéndose viejos con recuerdo añorado, vemos el mundo como el bote de basura más común pero a la vez más corrosivo de la ciudad, vemos como todos nos vamos yendo, sobre todo ella, que se va sin más hacia la lejanía.. Se va con aquella aurora boreal que le da brillo a sus ojos.

Aquél volcán que jamás hizo erupción, sacó sus fuerzas, sus despojos, sus llantos de realidad y sin más.. Dejó de ver lo que lo mataba y atormentaba toda su vida.

Aquél volcán me consumió a mi mismo.

Aquél volcán me ayudó a no seguir sufriendo.

Aquél volcán.. Me enseñó a ver.