Capitulo 20

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Ya entrada la noche, Jimin estaba acostado en el sillón de la planta baja con el sueño tan profundo que no se percató cuando entró Suga, se quitó el arco y los zapatos, se desabotonó un poco la camisa y se sentó en el otro sillón individual viendo a Jimin un momento y a los pocos minutos, tal vez al sentir la mirada se despertó el pelinegro

—Oh —Se sentó tallándose los ojos —Llegaste, de verdad estuvieron todo el día afuera

—Si, verificamos que parte del muro está más dañada para comenzar a reparar y hablamos de los Patriotas

—Que padre— Bostezó un poco y se enderezó con una sonrisa adormilada — Me gusta todo lo que haces siento que eres alguien importante —Se burló ya mas despierto

—¡Soy! —Se puso de pie y acostó a Jimin en el sillón poniéndose entre sus piernas con una picara sonrisa —Que no se te olvide, tal vez tú seas algo de esos Lobos blancos pero yo soy la mano derecha de Jungkook

Jimin rio y con su manos atrajo el rostro para juntar sus labios, el beso fue tan intenso que saliva escurrió de sus bocas deslizándose hasta el cuello del peli negro, las manos de Jimin acariciaron el trasero de Suga, recorriendo el cuerpo ajeno disfrutando de la lengua en su cuello y oído

Dejó escapar un leve gemido cuando la lengua de Suga mojó el lóbulo izquierdo y levantó la playera del peli negro para contemplar el ejemplar cuerpo y sin esperar más atacó las tetillas lamiéndolas y mordiendo

—Yoongi... —Pudo decir mientras tenía un momento de cordura

—Que —Comenzó a quitarle los pantalones

—¿Jungkook? Si alguien llega...

Suga rio y se alejó un poco sentándose y desabrochándose los suyos, quitándose el cinturón —No va a llegar, él de seguro se fue al hotel, le desespera que haya mucha gente

Se bajó todo y se puso de pie terminándose de quitar hasta la ropa interior, Jimin con los ojos clavados en su blanco cuerpo, también lo imitó y se acercó tanto que sus miembros se rozaban, con una mano tocó lentamente el muslo de Suga hasta llegar al trasero y lo acarició con sus yemas y uñas

—¿Qué esperas?

—En verdad quieres.... —Siguió deslizando su mano hasta la cintura con suavidad y Suga cerró sus ojos soltando un suspiro

—La verdad...Si... —Agarró la playera para quitársela pero Jimin se lo impidió asustado —No importa

—No —Le dijo como orden —Hasta que al menos sea solo una cicatriz... —Por un momento titubeó al verse la gasa

Suga sintió lo tenso y lo tomó del rostro para besarlo con pasión, caminaron un poco hasta caer nuevamente al sillón ahora Jimin sobre Suga, éste separó sus piernas sintiendo como el miembro de Jimin se restregaba en su entrada y testículos por la simulación de embestidas que hacia

Sus sentidos despertaron en segundos y no tardó en querer gemir, pero lo hacía quedito para no despertar a los otros que se encontraban en la planta alta, el pelinegro estaba bajo el efecto del medicamento así que por el momento no le dolía la mordida aunque estaba seguro que por el esfuerzo al día siguiente estaría bastante fuerte

Le levantó la playera y besó sus pezones, Suga cerró sus ojos y jadeó por aquel acto sintiendo como se quemaba con cada camino que saliva que dejaba esa boca carnosa, siguió besando su vientre y bajó hasta llegar a ese miembro totalmente erecto, lo besó varias veces saboreándolo como un dulce y con una idea en la cabeza se enderezó y vio al chico pícaramente

Acercó sus dedos y Suga sin pensarlo dos veces tomó su mano para lamerlos; los lamió de forma tan excitante que Jimin se mordió el labio para no gritar de placer, su virilidad estaba más que despierta y una vez que terminó de generarle ese placer con su boca introdujo y estimuló la entrada hasta que se acostumbrara a la intromisión que venia

Love is Blind, Deaf and Fucking DumbDonde viven las historias. Descúbrelo ahora