7 De Febrero de 2018

3 1 0
                                    

Hoy, te he vuelto a recordar.

He escuchado audios tuyos
que tengo en favoritos.
Se me ha vuelto a poner la piel de gallina
al leer algunos mensajes,
como si todo fuera como antes
Pero no es así. Ya no estás aquí.
Ya no hablamos, no espero
encontrarme un mensaje tuyo
Ya no nos desahogamos hasta
las tantas de la noche.
Ya no me llamas si necesitas hablar.
Han pasado cuatro meses
y sigo sin poder evitar pensarte.

Todavía me pongo nerviosa
si veo a alguien que se te parece,
aunque nunca resultes ser tú.
Se me hizo (hace) difícil pasar página.
Porque hubo un tiempo en que
quería verte a todas horas,
quería saberlo todo de ti,
desde las cosas más triviales
a tus temores más profundos.
Miento, sigo deseándolo.

Pero sé que otras personas
te harán más feliz
de lo que jamás podré hacerlo yo.
Y a pesar de todo
seguiré amando tu sonrisa,
seguiré manteniendo la esperanza,
por si un día me recuerdas,
abres los ojos y te das cuenta
de que no deberías haberte conformado
con alguien que no supo valorarte
como te mereces.
Y seguirás arrasando ciudades
con esa energía que tienes,
seguirás rompiendo corazones,
sin dejar de pensar en ti mismo
como siempre has hecho inconscientemente.

Y es que por mucho que ansío tu regreso.
Ya nada volverá a ser como antes.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 07, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Textos de SunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora