En la entrada todo estaba en silencio, nadie emitía ningun sonido por las palabras del primogenito de los Marsson quien tambien estaba sorprendido por lo que había dicho.
- No sabía que tenias novia- dijó Sara con sorpresa.
- Si de hacho muchos no saben- Rayen estaba en silencio recalculando lo que había dicho él.
- Me sorprende, tu no eres de aqui, ¿cierto?- su mirada se pozo en la pelinegra.
- Cierto, ella me vino a visitar- Samuel estaba nervioso de que supiera quien era.
- Mi hermano no habla mucho de ella- esta vez habló Alexis.
- Bueno dejemos este tema de lado- Rayen pudo pronunciar algunas palabras- nosotros tenemos cosas que hacer- dijó mientras golpeaba levemente el lado derecho de Samuel.
- Es cierto, en la cocina esta el café recién hecho Sara si quieres pasar- ella asintio.
-Me encataria una taza- decía mientras iba hacía la cocina.
-¿Qué creen que hacen?- dijó en voz baja Alexis.
- Mientras tu entretienes a tu amiga nosotros vamos a ir a la biblioteca- el joven no muy convencido acepto aquello.
Mientras Alexis le servia una taza de cafe a Sara, Samuel y Rayen se dirigieron hacía la biblioteca abandonada que quedaba a unas cuadras de la casa.
En el camino la joven se colocó la capucha del buzo para que nadie la reconociera, era cierto que a esas horas de la mañana nadie andaba por las calles pero era mejor prevenir que lamentar.
Al llegar a la esquina vieron la antigua biblioteca, la construccion era de madera en el exterior para darle un toque delicado, Samuel intento abrir la puerta pero estaba cerrada y con unos golpes la logró abrir. Todo el lugar estaba lleno de polvo, parecia que en decadas alguien habia pisado ese lugar, los libros estaban casi desechos por los ratones, las mesas que se encontraban a la izquierda estaban llenas de tierra. Con cada pisada que daban el piso crugia y el candelabro que se encontraba en el techo parecia que en cualquier momento se iba a caer.Rayen empezo a recordar cuando su padre la traía para leer algunos libros de fantasía, misterio y otros más, un aire de melancolia se sintió ahi donde tambien Samuel lo pudo sentir, la miró por un momento y no podia seguir entendiendo como la pudieron llevar hasta el extemo, dejarla sin familia y dejar que se convirtiera en una asesina sin sentimientos, desvio la vista hasta una cortina que se encontraba justo en una esquina, le parecia inecesaria.
-Rayen tu ya conocias este lugar, ¿cierto?- se acercó quedandose a unos centimetros.
-Si, ¿porqué?- vió aquella cortina de color vino en la esquina.
-¿Esto estaba ahi antes?- ella se acercó.
-No, nunca estuvo ahi de hecho la biblioteca es todo lo que vez aqui- se quedó intrigada.
Curiosos corrieron aquella tela y lo que no esperaban era encontrarse con una puerta, los dos se miraron confundidos e intrigados a la vez, Samuel intento utilizar el mismo metodo que con la puerta de la entrada pero no pudó conseguirlo.
-No creo que podamos abrirla- dijó mientras la tocaba tratando de encontrar algo.
- Apartate- Samuel se hizo hacía un costado.
Rayen acerco su mano a la cerradura, sus ojos volvieron a su color natural y el metal empezo a congelarse de apoco y con un golpe se rompio, el rubio estaba asombrado, aun le costaba creer que ella tenia esas capacidades y aun mas que podia utilizarlas a su antojo.
Una vez que dieron paso a la habitacion se encontraron con muchos archiveros y en el fondo un escritorio que se encontraba en las mismas condiciones que las mesas.
Cada uno se dividio los sectores para revisar si habia algun archivo sobre su familia, Rayen empezó a revisar del lado izquiero mientras que Samuel empezó con el contrario. Al pasar las horas no encontraban nada que los ayudara en algo, solamente la información de cada familia del pueblo y las transacciones ilegales que habían hecho algunos residentes pero nada de su familia.
Samuel estaba cansado de leer cosas sin importancia solamente queria descansar por un momento, se sento en aquella silla no sin antes sacudirla un poco.- No es posible que no encontremos nada- Rayen estaba frustrada.
- Debe haber algo- Samuel golpeo con sus puños el escritorio y lo siguiente que escucho fue algo caer al suelo.
Corrió un poco la silla y debajo de aquel marmolado vió una pequeña carpeta de color azul, se agacho con cuidado para levantarla, descolgo los elasticos y la abrió, en ella había unos recortes sobre el incendió con una imagen de la casa quemandose, Samuel siguio investigando y encontro algunos papeles más, en ellos estaban la información de la familia con una foto de ellos, ahi pudo ver al padre un hombre de tez blanca ojos grises, cabello negro, llevaba un traje negro dejandolo ver con un toque elegante, en sus brazos tenia una pequeña pelinegra de ojos gises verdosos, se veía bastante tierna con el vestido azul y las zapatillas del mismo color, a su lado izquierdo se encontraba una mujer de larga melena de color castaño claro, ojos marrones, iba vestida igual que su hija pero su vestido era de color vino y en sus brazos tenia un bebe, todos parecian felices en aquella fotos ajenos de los que le pasaria despues.
- ¿Esos son tus padre?- dijó mostrandole la fotografia.
- Si- en su garganta se le habia hecho un nudo, hace mucho tiempo que no veia a sus padres - esta foto nos tomaron unos dias antes de aquel suceso- por su cuerpo recorria la furia.
- Creo que esto era lo que estabamos buscando- Samuel empezo a sacar todos los papeles-creo que sabremos despues de todo porque le hicieron eso a tu familia- pero no pudo seguir hablando por un ruido que se escucho.
El lugar se quedo completamente en silencio y unas pisadas se empezaron a escuchar por la biblioteca, el piso crugia a cada pisada, Samuel y Rayen se escondieron detras de la puerta no sin antes recoger los papeles.
Cada vez más se escuchaba que esa persona se acercaba a la habitación, los dos jovenes esperaban a ver quien era y Rayen estaba lista para atacar al intruso.
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Cicatrices del pasado
ParanormalUna familia se muda a otra cuidad para resolver sus problemas familiares, aquella cuidad es la que toda persona desearía estar pero lo que no saben es que en guarda misterios que de apoco se van a ir revelando