LOS CAIDOS-L. MARTÍNEZ

CAPITULO 1-EL COMIENZO

Víctor preocupado por las consecuencias que esto podría traer a su amigo, buscaba con desesperación la forma de detener lo que él consideraba una locura para todo ángel, Víctor deseaba que Alphonse abandonara esto de forma voluntaria así que decidió hablar con él frente a frente.

En el momento en que Víctor encara a Alphonse, este le dice que tiene que abandonar esta ridícula situación que sabe perfectamente que los humanos y los ángeles son distintos y que sobretodo sabe que ellos como seres divinos no tienen el derecho de enamorarse, Alphonse le contesta de una forma cruda a Víctor y le dice que el amor es algo increíble que lo ha llenado de una fuerza única y que con gusto se arrancaría sus alas si eso le permitiera estar al lado de Berenice eternamente.

Víctor de una forma muy violenta le responde a Alphonse que todo lo que está diciendo sin duda alguna es una locura y que lo que él llama amor es algo absurdo que no puede ni debe de existir y Víctor con una voz amenazante le da a un ultimátum a Alphonse diciéndole que por el bien de él y el bien de Berenice debe renunciar antes de que los eternos se den cuenta de esta situación.

Alphonse da una respuesta tajante a Víctor diciéndole que si debe enfrentarse a los eternos para defender su amor que así sea, Víctor furioso y decepcionado a la vez por la respuesta d su amigo decide solucionar las cosas por sí mismo diciéndole a Alphonse que si sabe ¿cuál es la única forma en que un ángel puede morir? , Alphonse sorprendido por la pregunta le responde que eso nadie lo sabe ya que los eternos son los únicos que tienen la respuesta a esa pregunta.

Víctor apuntando la mirada hacia el piso sonríe y le dice no eres el único que ha quebrantado reglas amigo mío, me llevo mucho tiempo pero finalmente descubrí nuestra más grande debilidad, Alphonse sorprendido le dice a Víctor ¿qué has hecho?, Víctor le responde diciéndole que ha hablado con un caído y que este ha cambio de ese secreto le ha pedido a cambio las almas de 70 humanos, Alphonse reacciono aterrado y le dice a Víctor que como se ha atrevido a hacer semejante trato.

Víctor le responde a su amigo que no había gran diferencia con lo que él estaba haciendo y que por lo mismo el no deseaba que sufriera más, así que le quitaría la vida con sus propias manos, Alphonse le dice que es una tontería lo que está diciendo y que no existe forma de comparar los caminos que ambos han decidido tomar.

Víctor le dice a su amigo que no se preocupe por su amada Berenice que el cuidara su alma y le jura que no formara parte de las 70 almas que debe entregar y que además antes de morir le compartiría su secreto.

Víctor le dice a Alphonse que la única forma de matar a un ángel es bañar una espada hecha de oro y plata con la sangre de un ángel de igual o de mayor poder que él desde la empuñadura hasta la punta y al mismo tiempo introducirla abajo del corazón la sangre divina y los materiales de la espada invocaban un fuego fatuo capaz de hacer arder el alma de un ángel hasta el límite ya que los fuegos fatuos nunca se extinguen por que se alimentan de las almas ya sean divinas o humanas, de esta manera un ángel pierde su divinidad convirtiéndose en ceniza que cae a la tierra.

Alphonse le dice a Víctor que eso es absurdo ya que sabe perfectamente que nadie es capaz de invocar un fuego fatuo y que además de poderlo hacer lo más seguro es que el fuego fatuo también consumiera a quien lo invoco.

Víctor le dice a Alphonse que podría creerlo o no pero que finalmente había llegado el momento de comprobarlo, en ese momento Víctor saca su espada y se abalanza sobre Alphonse este logra esquivarlo, aunque resulta herido en su ala derecha en ese instante Alphonse aprovecha para poder sacar su espada y poder defenderse, es una batalla sumamente cruel donde los dos amigos se enfrentan, desafortunadamente para Alphonse, Víctor resulta más hábil en el combate y ha logrado herirlo muchas veces.

en su última estocada Víctor entierra su espada debajo del corazón del Alphonse y en ese momento Alphonse comienza a sentir un dolor sumamente cruel, es capaz de sentir un calor que consume cada una de las partículas de su cuerpo, Alphonse le dice a Víctor que como es posible que esté pasando eso si ni una sola gota de su sangre toco la espada, Víctor sonriendo le responde que no era necesario que fuera su sangre y mirándolo a los ojos le dice que la espada se bañó completamente con su sangre y que ese calor que sentía tan intenso era el fuego fatuo que estaba despertando gracias a su sangre.

Víctor le dijo a Alphonse que no se preocupara que dentro de poco el moriría y que descuidara que el mantendría la promesa que le había hecho y que era una lástima que tuviera que ser el primer ángel que moriría en sus manos.

La magnitud de la batalla entre dos ángeles no pasó desapercibida para los eternos, en el momento en que Alphonse comenzaba a arder un rayo divino logro extinguir el fuego evitando que este muriera eran los 7 eternos quienes se presentaron en frente de los ángeles.

Los siete eternos eran seres superiores a los ángeles eran a los seres que los humanos consideraban sus dioses, se decía que estos eternos en algún momento fueron ángeles pero que su poder logro trascender a través de los siglos, cada uno de ellos tenía un poder absoluto y ninguno era superior o inferior al otro, nadie conocía sus nombres simplemente bastaba saber que eran la eternidad absoluta.

Con una voz estruendosa ordenaron a Alphonse y a Víctor que se arrodillaran ante ellos, ambos lo hicieron y los eternos con su misma omnipresencia preguntaron quien había ocasionado ese caos a lo que Víctor respondió que Alphonse había caído en perdición ya que se había enamorado de un humano y que él lo único que estaba haciendo era castigarlo por su pecado.

Los eternos con una voz que cimbraba todo a su alrededor le dijeron a Víctor que él no tenía derecho a castigar a otro ángel y que en efecto Alphonse había traicionado su naturaleza y que sin duda recibiría un castigo por eso, pero que él también había caído en un pecado irreparable y que también seria castigado por traicionar la voluntad de la eternidad y que ellos sabían absolutamente todo sobre sus pecados.

En ese momento los eternos trajeron frente a ellos a Berenice ante la mirada sorprendida de Alphonse y los eternos dijeron que el castigo por ir en contra de la naturaleza de un ángel era separar el alma del humano y esparcirla en la tierra para que no volviera a reencarnar y que el ángel seria condenado a perder el brillo de sus alas y a vagar por la tierra durante la eternidad.

Alphonse con lágrimas en sus ojos le suplico a los eternos que la dejaran vivir que el sacrificaría su alma y con gusto moriría con tal de que su amada Berenice pudiera vivir, esto conmovió a los eternos quienes le dijeron a Alphonse que tenía que recibir su castigo pero que debido al gran amor que le tenía a Berenice no desintegrarían su alma si no que la dejarían vagar por la tierra hasta que reencarne y que él tendría que buscarla durante cientos o miles de años hasta encontrarla y que en ese momento él tendría la oportunidad de probar que ese amor era digno y que no era un error, Alphonse con un dolor enorme acepto la propuesta de los eternos.

Víctor al escuchar esto se llenó de una furia terrible y le reclamo a los eternos el por qué habían tomado esa decisión a lo que los eternos respondieron que él no tenía derecho a cuestionarlos que su pecado era mucho peor, que su pecado era el de no valorar las vidas celestiales y las vidas humanas y que su egoísmo era su debilidad.

En ese momento los eternos detuvieron el tiempo y despojaron a los ángeles de su brillo quitándoles la capacidad de volver a casa, diciéndole a Alphonse que era su única oportunidad y a Víctor que este era su castigo, Víctor en ese momento miro fijamente a Alphonse y le juro que encontraría el alma de Berenice antes que él y que la destruiría para que el cayera en el dolor, en ese momento el destino entre Alphonse y Víctor quedo sellado y una eterna rivalidad acababa de nacer, de eso han pasado más de 2000 años ahora la búsqueda de Alphonse continua y una serie de sucesos que provocaran una guerra entre el cielo y la tierra están a punto de empezar.