Capítulo 4: No entres a mi habitación

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Freddgoll: *la mira de arriba abajo y sonrie*
Bun: ¿Qué es lo que tanto miras?
Freddgoll: N-nada
[¿Que me pasa?¿Por qué no puedo dejar de mirarla?]

Bun: Ok, entonces... ¿me puedo sentar?
*Le pregunta con voz tierna sin ella saberlo*

Freddgoll: Eh? C-claro, no hay problema
*sonrie nervioso*

Bun: Gracias, eres muy amable Freddgoll 
Freddgoll: Gracias Bun
*sonrie*

Durante una hora Freddgoll  y Bun estuvieron hablando en la mesa, hasta que de repente Bun se levantó y dijo mirando al reloj de su móvil que ya se hacía tarde, y que sería mejor que volviera a su casa.

Bun: Ha sido un gusto hablar contigo Freddgoll
*sonrió mientras se levantaba de su silla* 

Freddgoll: El gusto fue mio Bun, ¿que te parece si me das tu número para que quedemos alguna otra vez?
Bun: ¡Claro que si! ¿Como no se me ocurrió?

Después de esto Bun dictó su número de teléfono a Freddgoll y se despidió de él para irse a su casa, afortunadamente ya no estaba lloviendo, aunque el suelo seguía completamente empapado por aquella gran lluvia.
Al cabo de un rato llegó a su casa, llegó bastante tarde por lo cual evitó hacer el menor ruido para despertar a los demás, sin embargo lo primero que vio al abrir la puerta era dos niñeros enojados esperando pacientemente a que regresase de donde fue

Gref: ¡¿A donde fuiste?!
Bun: No es tu problema
*se quitó su abrigo y lo colocó en el perchero de la entrada*

Gref: ¡En realidad si es mi problema! ¿Me vas a decir a donde fuiste?
Bun: No necesitas esa ventaja
*fruncio el ceño, subió las escaleras y se dirigió a su habitación*

Bun abrió su armario y se empezó a desvestir para ponerse su pijama, pero de repente escucho que alguien golpeó su puerta y la grito:

Gref: ¡Bun voy a entrar y hablaremos los dos seriamente!
Bun: ¿¿¡¡Eh!!?? ¡Espera! ¡Me estoy cambiando! 
*dijo nerviosa*

Gref: ¿Cres que me engañarás? ¡No soy tan tonto!
*acto seguido abrió la puerta*

Bun: ¿¿Eh?? ¡¡¡¡¡Ahhhhh!!!!!
Gref: P-perdón
*dijo avergonzado, después de esto cerró la puerta*

Bun: ¡Pervertido!

Bun se vistió rápidamente y salió de la habitación, bajo al salón para hablar con Gref, y efectivamente allí lo encontró

Bun: ¿Qué querías?
*molesta*

Gref: No vuelvas a salir de noche... puede ser peligroso
Bun: Te sangra la nariz, no vuelvas a entrar en mi habitacion mientras me cambio imagínate que pasaría si hubiese estado sin el sostén... Bueno, mejor no te lo imagines
*le alcanza a Gref un pañuelo*

Gref: Gracias, y perdón. Será mejor que te vayas a dormir
Bun: Si, buenas noche
*Se dirige a su habitación y durme*

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