Extra 1

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Tres niños menores de cinco años se encontraban escapando de su padre el quien hacía movimientos pesados, a la vez gruñia y movía sus grandes manos

Los gritos no se hicieron esperar y los tres se dirigieron tras su papi el quien se encontraba comiendo para llenar aquel vacío que seguía teniendo desde que desperto, sin contar esa vez cuando vomito y tuvo que volver a comer desde entonces no se a llegado a sentir bien

Su esposo y Alfa le llegó a preocupar de tal grado de querer llevarlo al médico y asi pedirle a sus padres que cuidaran de los pequeños pero el quien sostenía un plato con avena y chocolate se negó rotundamente hechandole la culpa a su alimentación

Dejando de lado su plato y aquel dolor de estómago que sentía tomo a los tres como pudo para propinarle a cada uno un beso en la frente y asi ganarse por parte de sus hijos unas sonrisas para después ver como su Alfa trataba de no hacer ruido para tomar a la pequeña Alfa ya que está estaba más cerca de su alcance

Su sorpresa fue grande cuando la pequeña se dio la vuelta y vio como otro de sus hijos se colocaba alfrente de ella con la intención de protegerla pero esta no quiso pues como su padre siempre tenía en mente quien era el que debía proteger y en este caso la pequeña Jyung sentía la necesidad de proteger a sus hermanos Omegas además como colocaba de pronto su mano en el estómago de su padre dejando a todos confundidos en especial a los dos mayores quienes no tenía idea alguna de su repentino comportamiento

El mayor de todos ya tomando a los tres y darle un abrazo les hizo salir al patio trasero para así jugar y conversar con el quien todavía buscaba comida está vez en la nevera como si este le daría algún platillo delicioso lo cual al verle como cerraba con enojo y hacía un puchero supo que se había acabado todo como lo había previsto

- te dije que te llegarias acabar todo - murmuró el mayor tras sentarse a lado de su esposo

El menor no dudo en colocarse en el regazo de este con la intención de tener lo que más deseaba ahora

Más comida, chocolates, tenía antojos de ello y más cuando estos venían con almendras, amaba las almendras en los pasteles y barras de chocolates y como su novio le hubiera leído la mente este sólo negó tras besarle el cachete para después darle un par de besos en los labios sabor a chocolate

- ¿como fue.. q-que?

- soy tu Alfa, Jimin, conozco todo de ti y lo que quieres ahora mismo y sabes que llevo semanas en donde no trabajo, debo comprar cosas necesarias.. recuerda que tenemos tres niños en crecimiento

Viendo como su Omega hacia un puchero tras saltar encima de el fue ahí cuando estaba por tomarlo y sentarlo a su lado para así ver bien a sus pequeños

No obstante aquel sutil movimiento en la zona baja de su esposo le hizo parar en sus movimientos y sorprenderse al sentir está vez como se movía de a poco el estómago del quien todavía saltaba en el

- Jimin, para - el mencionado confundido hizo caso quedándose viendo donde este miraba.. a su estómago

Y fue ahí cuando otra vez vieron pero esta vez estando más tranquilo los dos llegaron a sentir aquel patada en el interior del Omega

Escuchando los gritos de sus pequeños fue entonces que se separaron, la pequeña llegó donde el Omega y colocó su oreja en el estómago de su padre con la intención de escuchar algo

- ¿que haces, cariño? - preguntó su padre el Alfa al verla como seguia en esa extraña posición

- ¡¿estas escuchando a nuestro hermanito?! - gritó soo al ver a su hermana y está llego donde el saltando y gritando que su hermano era un Omega haciéndola ella la única además de su padre Alfas dejando a sus padres atónitos ante aquella escena

Al ver a los niños subir los escalones fue entonces cuando el Omega sintió a su Alfa tocar su vientre un poco abultado tras supuestamente la comida ahora siendo un pequeño niño Omega

Aquellas náuseas, hambre y mareos eran para el en ese entonces síntomas de algún alimento descompuesto y ahora darse cuenta gracias a su pequeña que no era eso además de sentirse confundido por como fue que una pequeña de tres años supiera algo así también tenía un sentimiento de miedo tras no escuchar a su Alfa hablar y no le culpaba pues ya tenían tres hijos y claramente sabiendo que vendría otro no lo negaría ni nada por el estilo pero el miedo seguía hasta que sintió y vio como su esposo se acercaba a darle un beso en su estómago haciéndole sonreír y darse cuenta que aquel noticia nueva para los dos no se lo hubiera tomado para mal y ver como aquella sonrisa en él le hacía sentir bien y más al volver a sentir aquellas patadas en su interior.

Una Linda Sorpresa |Omegaverse Donde viven las historias. Descúbrelo ahora