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¡Aléjate!

...

- ¡Baka! ¡Miserable! ¡Aléjate de mi!

Pudo ser oído un grito estridente y colérico por los pasillos del colegio, gritos eses que asustaron a todos los que estaban cerca, viendo como la figura rubia se desmoronaba en rabia totalmente roja.

- Aléjate... - Susurró hostil retrocediendo sus pasos a la medida que el blanco de toda su agresividad se acercaba, con esa mirada que le enojaba. - ¡Imbécil! - Sibilo.

- ¿Porque? ¿A Bakugou-chan no le gusta que yo me acerque? - La menor figura entre los dos estremeció, desviando la mirada rojiza para cualquier cosa que estuviera a alcanze, odiaba mirarle en los ojos.

- No. Me molestas.

- Pero ¿porqu-

- Arghh! Deja de preguntar siempre el "porque" el ''porque''! ¡Molestas! ¡Molestas demasiado! No te finjas imbécil, no eres él inocente que aparentas ser. - Trató de evitar mayor acercamiento por parte de él al alejarlo con la mano con brusquedad.

Él en respuesta parpadeó por pocos segundos y ajustó con una de sus manos una parte de su pelo que algunas veces obstaculizaba su visión, ultimamente su pelo estaba más largo, algo que no le gustaba mucho. Umideció los labios y la encaró, era increíble el factor de que le ganaba en altura sólo algunos centímetros, pero no se sorprendía con eso al todo, era el más bajo de los chicos y ella, una de las chicas más altas.

- Alguna vez he dicho que lo soy? - La ceja rubia se arqueó al mismo tiempo que chaqueó la lengua en fastidio. Le molestaba en demasia la situacíon en que estaba, odiaba sentirse acorralada todas las veces que ese maldito con aparencia anfibia se acercaba. - No debes deducir cosas así, Bakugou-chan. - Dijo despacio observando los nuances de duda en el rostro feminino que de seguro afirmaría, tenia una contida rabia borbullando bajo la piel broceada y que ahora estaba en un bello tono rojizo, contrastando muy bien con sus ojos diminutos de igual color.

Ella bajo la cabeza mirando al suelo nerviosa mordiendo su labio inferior, ahora no podria ni siquiera levantar la mirada solamente para que pudiera ocultar lo gran sonrojo que de seguro tenia en ese momento. Tenia muchas ganas de darle una bella paliza, y esa idea era mucho que tentadora pero no podria hacer eso y ponerse en risco de una nueva suspención. Ya tenia demasiadas en su histórico.

- Mierda. Esta bien, ahora me hagas el favor de alejarse. - Pidio casi en un susuro que hizo el fruncir su ceño y haciéndose el sordo llevar una de sus manos hasta arriba de la cabeza de la chica, tocando su pelo rebelde, sonrio al percatarse que mismo si intentara peinalo a su forma, el no le haria caso y volveria a su forma pontiaguda y rebelde. Ese pelo corto realmente eras indomable a igual que la chica que lo poseia. Sintio ganas de hacerle un cariño y aprovechar mas de la sensación de las cortas hebras rubias en contacto con la palma de su mano. Estaba bueno. Se quedo algunos minutos solo en sus pensamientos disfrustando del tacto distinto para si hasta que sintió como su muñeca era agarrada por manos pequeñas, femininas y bastante ásperas, y entoces bajada sin más. - Yo he dicho para alejarse. - Aún no lo encaraba y su estado se veia demasiado calmado. Por lo visto la tempestad se habia cesado, deduzió los alumnos que estaban a una distancia segura del lo que llamaban huracán rubio.

La mirada de ojos grandes cambió.

- Sabes, eres una chica muy complicada Bakugou-chan. - Se alejó un poco para el contento de ella. - Asi seras más dificil para mi. - Concluyó al llevar su dedo indice cerca del labio inferior.

- ¿Y lo que serias más dificil para ti bastardo? - Lo miró con seriedad y nerviosismo al cansarse de todo, preparada para salir de aquella situación desconfortable, pero al no contarse con el acercameinto mas que extremo del chico, acabó por se quedar en una situación mucho peor comparada a la que antes estaba, tan cerca al punto de lograr sintir la respirasión de él en su cara y malditamiente sintirse jodidamente intimidada.

- Porque asi serias mas dificil acercame a ti de manera que no quieras alejarme, al revéz, quizas algún dia quieras que me acerque más de ti, Katsumi-chan.

- Maldito Asui. - Murmullo entredientes.

- No, llamame Tsu.

- Pareces el nombre de una maldita chica.

- Entoces Tsubasa. Lo que a ti te gustar más.

- Joder...

...

N/A: Y este fue el final. Todos los derechos del nombre ''Katsumi'' pertenece a Ayacchikurai, ya que lo robe de la hija de esa hermosa pareja, que por casualidad es de total autoria de ella xD. Katsumi-chan es la ninã mas tierna que hay. Y mil perdones por la mala edición de la imagen de arriba, lo progama que uctilizaba tuvo algunos problemas :'v. Pero fue solo eso, bye bye, ojála les tenga gustado. Mas algunas disculpas por lo OCC xv.