Llega la madrugada y con ella el mar de sentimientos que me ahoga durante el día se libera, apago las luces y enciendo la música esperando que los gritos en mi interior cayen, se distorsionen y desaparezcan.
Es cierto que estaba en un mal lugar, pero ahora en ese lugar estoy sola, y me convierto en una nena pequeña que solo espera que tomen su mano para cruzar una calle, me convierto en una versión de mí de menor tamaño, empapada y con frío.
Y hay gente a mi alrededor pero ninguno me importa tanto.
Y vuelvo a ser la que llora más, la que quiere más, la que extraña más y vuelvo a enceguecerme observando la pantalla de mi celular en vano, esperando, siempre esperando.
Y llegas y te vas.
Y llegas y te vas y nunca es para mí, y me duermo esperando porque tal vez mañana va a ser el día.
Soy débil y lloro aunque lo niegue, aunque lo evite .
Soy débil y creo en las palabras, y me sostengo de eso porque me da esperanza y creo en todo lo que decis y sigo esperando.
Entonces vuelvo a morder mis palabras, a esperar en silencio a torturarme pensando, reviviendo una y otra vez lo sucedido y el peso ahora es mayor, porque levanto la mirada y hay personas, muchas personas transparentes y grises y no puedo tocarlas aunque me acerque.
Ellos caminan y no pueden verme y me encuentro sofocada entre aquellos que no me importan y otros a quienes no importo.
De repente me doy cuenta de todo y todos a los que perdí y estás en la lista por no se cuanto tiempo, tal vez para siempre y me mata no saberlo y me enojo con vos por haberte alejado hasta que me dejo de engañar y enfrento la realidad, entonces me molesto conmigo misma por haberte alejado y habernos perdido.
E intento dormir aunque no pueda cerrar los ojos y qué tortura, qué tristeza siento y tenés a más personas, se que no te hago falta, no se si alguna vez realmente lo hice y no puedo acercarme ni alejarme, no puedo hablar ni seguir callando, se apodera de mis pensamientos, es lo unico que ocupa mi mente, lo que me atormenta.
Las cosas son peores desde ese día, y se que no puedo repararlo.
ESTÁS LEYENDO
Palabras de una noche fría
PoetryEsas noches en las que el frío no llega desde afuera, si no que es irradiado desde adentro. Esas noches en las que ni el más cálido de los recuerdos, el más ardiente de los besos ni el más acogedor de los abrazos puede descongelar mi alma. Mis manos...