"Mi Querida Astrid"
Regresábamos a la orilla después de haber curado a Astrid del horrible azote de Odín. Había sido un vuelo largo, ya que la isla donde se encontraba el Buffalord era lejana y realmente estaba en medio de la nada. Teníamos que hacer un vuelo lento y tranquilo, ya que no sabíamos si Astrid podría tener alguna recaída o algo así.
Llegamos. Después de asegurarse de que Astrid en serio estuviera bien, todos la dejaron descansar; aunque hubo uno que no quería irse ya que no sabía si en la madrugada se le pudiera ofrecer algo. Mi amiga rubia lo convenció de que ella estaría bien y que yo estaría con ella; que si llegara a necesitar ayuda lo primero que haría sería avisarle.
Con un poco de pesar, el jinete de una pierna salió de la cabaña de Astrid y esta se dispuso a dormir. Ya que, aunque no lo decía, yo sabía a la perfección que no se sentía del todo bien, así como que le costaría un día recuperar todas las energías que perdió al luchar con esa terrible enfermedad.
Al notar que Astrid por fin se había dejado vencer por el sueño, salí a tomar un poco de agua. Al hacerlo me percaté que Chimuelo estaba fuera.
– ¿Qué estás haciendo aquí Chimuelo? –pregunte con confusión a mi amigo.
–Hiccup me dio la instrucción de que tenía que estar al pendiente de Astrid y de ti – respondió él como si nada–. Ya sabes como es mi hermano de preocupón, y más si se trata de esta chica –agregó con humor.
–Tienes razón –respondí con una leve risilla–. Hiccup la quiere, y me alegra saber que mi chica no está sola –eso último me daba un poco más de tranquilidad, aunque no toda la que necesitaba.
Mientras Chimuelo le daba un vistazo a Astrid, yo salí a beber un poco de agua. Seguía espantada y con un poco de nervio, ya que apenas caí en cuenta de que estuve a punto de perder a mi mejor amiga. Ese humano, Viggo, es alguien muy tirano. Ni siquiera el desquiciado de Dagur hizo algo tan atroz...
– ¿En qué piensas, Tormenta? – preguntó Chimuelo, posicionándose a un costado mío–. Te noto muy rara desde que regresamos.
Estaba tan metida en mis pensamientos que no me percaté de que Chimuelo había salido de la cabaña de Astrid.
– La verdad es que estoy un poco espantada –dije con un tono de tristeza- apenas caigo en cuenta de que Astrid, mi mejor amiga, estuvo a punto de morir.
– Pero no murió –Respondió mi amigo– Tormenta, no murió.
– ¿Y qué hubiera pasado si no hubiéramos encontrado al Buffalord?–.lo rebatí, mirándolo. – No deberíamos pensar en eso Tormenta –arguyó– tienes que ser positiva y pensar que ahora ella está en su cama, descansando y recuperándose favorablemente.
Eché un vistazo a la cabaña de mi amiga y sonreí.
–Tienes razón –solté, un poco más relajada– ya no voy a pensar en el pasado. Viviré el presente y disfrutare cada momento con mi Astrid.
– Eso es nuestra tarea, querida. – ¿sinónimo? – Estar con ellos, en las buenas, en las malas y en las peores. –Continuó– apoyarlos en sus decisiones y orientarlos a que hagan lo correcto. Yo apoyo a mi hermano siempre y él me ha demostrado que el apoyo es mutuo –finalizó con una sonrisa
Sin más que decir, alzo el vuelo hacia la cabaña del castaño, le dediqué una sonrisa y me adentré a la cabaña de Astrid.
– Mi querida Astrid. –Hablé mientras la miraba dormir– Quiero estar para ti en todos los aspectos. Quiero estar ahí contigo cuando te conviertas en la señora Haddock. –Reí un poco– Cuando tengan a sus crías. –Hice una pequeña pausa– Por eso te prometo que nunca más te dejaré entrar en peligro. Que no dejaré que ese humano, Viggo, se te acerque; estaré dispuesta a dar mi vida por ti. Eres mi mejor amiga, mi hermana, mi confidente.
>> Mi querida Astrid.
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Hola hola!!!
Si supieran como batalle con el nombre xD okya
Serán cuatro shots que hace un año utilice para competir en un concurso pero por algunas razones no termine nunca xD (Sorry )
Bueno, pronto subiré el segundo, promesa de garrita
Y bueno, gracias a Paula de Vera y a DragoViking por ayudarme a esto. Las quiero!! <3
