Believing in fate

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Augustina tenía unas ganas de llamar a Nicolás,  ella no sabía que le iba a decir , pero sabía que le diría algo al muchacho .

Ella decidío que lo llamaría a su casa , ya que a diferencia de ella  , Nicolás no tenía un celular propio .

Ella duró horas , días , semanas , pensando en lo que le diría , ella llegó hasta escribirlo en una libreta para no perderse .

Ahora lo único que le faltaba era la valentía . Su alma quería llamarlo , pero su cuerpo se negaba a responder .

Después de un rato se le fueron todos los miedos , agarró su celular , le rezó a Diosito por unos Segundos , y al prender la pantalla de su dispocitivo lo primero que notó es que estaba en 5% .

Se maldijó a si misma a lo bajo y con una furia intensa puso a cargar el celular .

Estrelló la libreta contra la pared y se hundío entre las suaves sábanas que se encotraban en su cama .

Hay se quedó , pensando en que si lo del celular era una señal de que no debía llamarlo .

Lo penso tanto que se quedó dormida esa misma mañana .

Al despertar , notó que no estaba de noche , así que agarró su celular lo prendío , chequeó la hora , las 5 : 00 , y después chequeó cuanta carga tenía , 100% .

-Perfecto !- se dijo a si misma en voz baja .

Ya era hora de que llamara para decír lo que quería decír , eso sí , ella estaba un poco nerviosa de cómo reaccionaría el chico .

Corrió hasta la esquina en donde había caído su libreta , la recogío y marcó el número de la casa de su amigo .

Espero unos segundos y le respondío el correo de voz .

Trató de llamar otra vez , y pasaba lo mismo .

- tal vez están fuera de casa - trato de calmarse - si , seguro es eso , quizás hayan ido a la casa de su abuelita , cómo hacen al comienzo de todas las vacacíones - asegúro .

2 semanas después ella volvió a llamar con las esperanzas por el cielo .

- porfavor responde - susurraba ella al movíl .

- este número a sido cancelado - esas palabras crearon un hueco en la mente de Augustina .

- cancelado? - se pregunto a si misma .

Ella salío corriendo de su cuarto , bajo las escaleras y fue en busca de su madre , que ya que era la dueña de su empresa , se dió a si misma 2 meses de vacaciones , así que estaba libre .

- Madre !- grito ella exaltada .

- Madre ! - volvió a gritar entrando a la cocina .

- estoy aquí Augustina , por Dios , cuantas veces hay que decirte que una señorita no alza su voz - la regaño una mujer que parecía tener unos 30 años o menos .

- perdón madre , es que ... necesito un favor .

- que hiciste ahora Augustina .

- Nada ! Te lo juro ! .

- ajem - la señora miro a la niña en forma de regaño .

- digo . Nada madre - respondío ella en un tono más suave .

- mejor . Ahora , ¿ que era lo que necesitabas de mi ? - dijo mientras alzaba una ceja .

- bueno , te acuerdas de Nico .

- ¿ Nicolás Hernández ? .

- si .

- ¿ qué pasó con el ? .