Segundas Oportunidades

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-señorita Kim el desayuno está servido
-ponlo en la mesa por favor-contestó aún somnolienta
-por cierto, señorita, su padre, esta aquí, quiere desayunar con usted
-¿que?,¿ a que hora... Como...?-se levanto casi de inmediato- esta bien supongo que no tengo opción, iré enseguida, avisale por favor Frank.
-si señorita.

Solar, como le llamaban algunos de sus amigos, se despertaba otro dia en su más que perfecta vida, 7 en punto y su mayordomo le llevaba el desayuno a la cama, su rutina estaba siendo interrumpida por un ligero contratiempo, por primera vez en meses su padre le había ido a visitar.

Con bastante desánimo se paro de la cama pisando el frío piso de mármol, hasta su baño.
-¿a que habrá venido? - se preguntaba, a regañadientes logró mojarse con agua fría la cara para poder despertarse, no es que lo odiara, pero después del incidente que habían vivido hace un año, para ser exactos, lo que menos se Yong Sun era tenerlo a la mesa.

Tratando de estar lo más tranquila posible, bajo hasta el comedor de su apartamento donde su papá le esperaba sentado a la mesa de madera obscura.

-buenos días-saludo su padre en un tono extremadamente formal

-padre- contestó Solar haciendo una reverencia propia de respeto, - a que debo la visita?

Su padre tomó un sorbo de su café, y se quedo unos minutos sin decir palabra solo mirando los ventanales del departamento, que este estuviese en el piso 20 de un lujoso edificio ofrecía vistas inigualables.

-sabes, el despacho será tuyo,estudiaste para esto, te he preparado para que lo hagas un día. Precisamente hoy debo atender asuntos fuera y eran las entrevistas para los nuevos pasantes, y como mi hija es tu responsabilidad suplantarme en esa actividad.

-y ahí es donde debo de ir sin reprochar nada-dijo soltando un largo suspiro.

-no seas sarcástica, pero si, eres mi única hija y heredera, por supuesto que quiero que tu lo hagas

-bien, no es como si tuviera opción, ¿a que hora es?

-9:30am, se puntual, me retiro, debes escoger tres candidatos.

-si, lo hare- el papá de Solar se limpio cuidadosamente las comisuras de la boca con la servilleta de tela y se levantó de la mesa para irse a su destino.

Yong Sun odiaba todo lo relacionado a la abogacía pero ya que su padre tenía el despacho de abogados más prolifero de la región estaba más que decidido que estudiaría para heredarlo.
Nunca había tenido muchas opciones pero para ser justos, su papá jamás la presionaba demasiado, después de todo al ser hija única siempre había disfrutado de ser una malcriada en sobremanera.

Después de una corta sesión de ejercicio como le era habitual, a solar siempre le elegían el outfit completo, peinado y maquillaje que usaba para cada día, puesto que tenía a su disposición 24 horas a su estilistas, nada era al azar en su vida.

-Yong Sun, es tarde tu padre nos matara si se entera

Interrumpió Hwasa, su asistente personal mientras solar aún le estaban terminando el maquillaje.

-tranquila, no hay problema media hora tarde no es malo, así que estará bien

-pues más vale que si nos importe por que sin tu papa mi sueldo no se pagará solo-finalizó Hwasa con un aire dramático, a pesar de ser su empleada también era de las mejores y únicas amigas de Solar.

-oye pense que estabas en esto por que me querías.

-oh si preciosa , pero quiero más al dinero-le contesto guiñandole el ojo.

Tú NoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora