Preguntas

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La tensión se podía palpar aun a través de la puerta que separaba ahora a ambas mujeres, Byul camino en silencio por el pasillo hasta donde estaba la asistente de la Srita. Kim, se sentía aturdida de no entender que acababa de ocurrir, de un momento a otro había conocido a la chica más hermosa que jamás hubiese visto, y, sin embargo, los ojos de esta le miraban con una profunda tristeza,

¿sería posible que la hubiese conocido antes? Siguió hasta llegar con aquella chica bronceada y de escultural cuerpo que espera a la salida, Hwasa le miro curiosa

- ¿y bien ya paso al siguiente?

-si la srita. Kim lo ordeno

- ¿oye estas bien?

-ah, sí, si gracias por la entrevista- dijo un tanto insegura

Moon salió a toda prisa de aquella oficina, hwasa se quedó contemplando a aquella chica pálida de cabello negro salir como alma en pena

-vaya que Solar puede ser una perra en algunas ocasiones, tal vez debería pedirle que se calme – se dijo para sus adentros y camino en dirección a la oficina, trabajar tanto tiempo con Solar la habían preparado para ponerla en su lugar si es que se pasaba, estaba decidida a propinarle uno que otro coscorrón cuando al entrar se dio cuenta que esta  estaba en medio de  en una crisis existencial sentada en la silla inmensa de cuero, tenía la cabeza entre las manos como queriendo ocultarse.

-Solar, ¿Qué pasa?, ¿te dijo algo esa chica o qué?, ya dime que pasa? -Yong Sun seguía sin decir palabra, cuando por fin alzo la vista, su asistente contemplo sus ojos rojos –maldita sea ya dilo, ¿qué sucedió?

-es ella

- ¿quien?

-esa chica, es Moon

-espera, espera, ¿tu Moon?

-si ella, y no, no es mía, pero si es Moon Byul Yi- Solar se reclino en su asiento con la vista hacia el techo

-no puedo creerlo que descaro el venir y presentarse en esta compañía

-ella dijo que tuvo un accidente

-y eso que, eso no le da derecho de venirte a buscar. Pero ya se las verá conmigo ahora si me va a conocer

-no tonta, ella dijo que no recuerda lo último que le paso, los últimos tres años de su vida, ella no me recuerda, todo lo que sucedió entre nosotras, se perdió en su memoria, soy nadie para ella.

- ¿y le crees semejante estupidez?

-ella no era buena mentirosa, era todo menos una buena mentirosa, y cuando me vio, en verdad sentí, que era la primera vez que hablaba con ella, sentí que de verdad la conocía de nuevo

-diablos, estamos en un problema muy gordo.

-quiero vengarme, ¿sabes?, con o sin recuerdos de mí, lo que me hizo, paso en verdad, al menos para mí.

- ¿y si entiendes que la venganza no es buena?, ya déjalo pasar, si perdió todos esos recuerdos tal vez es momento de que tú también lo olvides.

-no, que no ves que la vida me acaba de poner todo en bandeja de plata, para que sea yo quien por fin gane en este juego- Yong Sun miro a su amiga

-me das miedo, Suenas muy decidida y loca

-llámala, la vamos a contratar

-tienes que contratar a dos personas así dijo tu papa.

-en verdad no me importa sal y escoge cualquier persona

- ¿la que yo quiera?

-si Ahn Hye Jin la que quieras

-genial entonces

-solo asegúrate, de que mañana Byul se presente a trabajar

-como encargues loca

- ¿que?

-jefa, jefaza quise decir

-ya lo creo

Hwasa salió a la sala de espera con la encomienda de encontrar a alguien más para la vacante, sintió algo de lastima por todos los asistentes a la entrevista ella estaba a punto de contratar al azar a la persona que le diera la gana en ese momento, miro a todos rápidamente y de pronto vio a alguien que capto su atención una chica de pelo rubio y corto miraba hacia el techo parecía aburrida, era la única que en verdad parecía no importarle tanto el trabajo.

-tu- la señalo desde la puerta, aquella chica le volteo a ver directamente

-¿yo?

-si tú, sigues en la entrevista, espera ¿cómo te llamas?

-Jung Whee-in- dijo con una deslumbrante sonrisa en el rostro, dejando ver un hoyuelo con ella-Hwasa pensó que era en extremo linda así que arbitrariamente decidió que ella se quedaría con el puesto, la paso a la oficina de la srita. Kim y se dispuso a despedir a los demás asistentes, eso sería todo por hoy, además lo que el señor Kim quería eran dos nuevas abogadas pasantes para la firma, el objetivo estaba cumplido.

Moon caminaba un tanto triste, odiaba haber perdido la memoria de una manera tan simplona , sus doctores le habían dicho que había sido durante un accidente en elevador, y hasta ahí sabían, podía ser que su memoria volviera con el tiempo, pero había un tres años de su vida que había perdido por completo y no había nadie quien le ayudara a recuperar todo lo perdido, se sentía mal, no por no pasar el filtro de la entrevista, o el hecho de que en verdad ni siquiera había sido entrevistada, si no por la srita Kim, esta le parecía en extremo conocida, y el  que ella le llamara Byul quería decir que también tenía alguna relación con ella, pero había muchas preguntas, ¿de dónde la conocía?, y sobre todo, ¿porque le veía con tanto coraje, con una tristeza contenida?, los ojos de aquel rostro que ella consideraba el de un ángel le intrigaban. Byul seguía divagando en sus pensamientos cuando recibió una llamada.

-¿Moon Byul Yi?

-si ella habla

-felicidades la pasantia es suya

-¿disculpe?

-preséntate mañana a las 8

-pero yo- la llamada se cortó, inexplicablemente había obtenido el trabajo, pero algo no le parecía en orden. Tal vez las respuestas que buscaba estaban más cerca de lo que creía, aunque sintiera que no debía aceptar esa plaza la curiosidad por saber de Kim Yong Sun era más grande.


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⏰ Última actualización: Mar 01, 2019 ⏰

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