Navidad

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Narra: Allison

Así llegó Navidad, en todo ese tiempo estuvimos tratando de averiguar más sobre Nicolás Flamel, con Helena, Emma y Emily hicimos muchas bromas a los de Slytherin, principalmente a Draco, y esperamos con ansias la llegada de las vacaciones, llegaron las vacaciones y Ron, Helena y Harry se quedaron, las gemelas, Hermione y yo tuvimos un viaje divertido, jugamos, comimos, bromeamos, leímos. Al llegar a la estación, fuimos directo al callejón Diagon a comprar los regalos

—Tienen dos horas para comprar lo que quieran, Allison aquí tienes tu dinero—dijo entregándome una bolsista bastante grande—Niñas aqui tienen su dinero ¡Vayan a comprar!—dijo y se fue seguida por Ted

—Yo le compraré libros a Hermione, a Helena un pack de bromas, a Ron una caja de chocolates y a Harry libros sobre Quidditch que se que le encantan—dijo Emma

—Yo le comprare una lechuza a Ron y algunas cosas de su equipo favorito de Quidditch, a Hermione una pluma y tinta especial, para Helena y Harry les mandaré una caja llena de chocolates para cada uno—dijo Emily

—Y yo le regalaré ropa a Helena y Harry, se que no tienen y toda su ropa es de su primo y tía, a Ron le compraré una camiseta de los Chudley Cannon—dije y cuando pasábamos por una tienda escuchamos un sollozo y nos acercamos a escuchar

—¿Que haremos Arthur? No podemos regalarles nada a nuestros hijos, por qué no nos alcanza el dinero—lloro

—Molls a los niños no les importará, mientras estemos siempre para ellos—intentó consolarla, las gemelas y yo nos miramos y decidimos darles un poco de nuestro dinero, salimos de nuestro escondite y los señores nos miraron con sorpresa, la mujer se secó las lágrimas y nos dirigió una amable sonrisa

—¿Usted es la señora Weasley? ¿La madre de Ron?—preguntó amablemente, Emma

—Si soy yo ¿Le pasó algo a Ronald?—preguntó evidentemente preocupada

—No le pasó nada, solo queríamos darle un poco de nuestro dinero, para que le compre cosas a sus hijos—ofrecí sacando varios galeones de mi bolsita junto con las gemelas

—Oh cielos... No hace falta de verdad—aseguró la señora Weasley

—Si si hace falta, Ron es mi mejor amigo y quiero que pase unas lindas fiestas con regalos de las personas que él más admira—dije con una sonrisa dejándoles los galeones

—¿Nos admira?—preguntó el señor Weasley

—Claro que sí y los ama demasiado—dijo Emily dejándole sus galeones

—Son sus padres por supuesto que los admira—dijo Emma dejándoles sus galeones

—¿Cómo se llaman?—preguntó la señora Weasley

—Nosotras somos las gemelas Black, Emma y Emily—dijo Emily

—Yo soy Allison Lenstrenge—dije y vi sus caras de sorpresa—Lo se, es raro ver a una Lenstrenge que quiera ayudar a los demás

—Acá está el claro ejemplo de que no somos como nuestras familias—aclaró Emma

—Por supuesto cielos, estamos felices de que nuestro pequeño Ronnie tenga unas amigas como ustedes—dijo la señora Weasley y nos envolvió en un abrazo. Luego de eso le compre a Hermione unos libros de Defensa contra las artes oscuras, transformaciones, encantamientos y pociones, a las gemelas les compré unas cadenitas de oro, a Helena un pack de bromas, a Harry un libro con estrategias de Quidditch y a Ron una lechuza negra con manchas blancas.

—En la mañana de Navidad—

Narra: Ron

Allison Lestrenge Y La Piedra Filosofal [Editada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora