Lo que perdimos (Bnha fics)

#2

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Habían pasado siete meses ya e Izuku estaba sentado, esperando con ansias su diploma. Se había graduado de U.A ¿Estaba ansioso? Por supuesto que si y Ochako, sentada a su lado lo noto, tomando su mano izquierda y apretando mientras le dedicaba una sonrisa. Cuando lo nombraron, muchos de sus compañeros le aplaudieron y el fue, con una sonrisa a recibirlo. Muchos murmuraban sobre su visible estómago, pero Izuku ahora le restaba importancia. Fue felicitado por todos los maestros y All Might le había dado un abrazo mucho más cálido que cualquiera de los otros docentes.

-Siempre tendrás mi apoyo y espero verte por aquí muy seguido, quiero ver a esa niña.-Dijo con una sonrisa, apuntando su estómago.

Deku aguanto las ganas de llorar y con su más brillante sonrisa, le dijo que lo haría. Por supuesto que lo haría.

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Al día siguiente Ema tenia que ir a su trabajo. Por supuesto que desertó apenas toco el pómulo para irse de casa. No podía, no ahora que esperaba que su padre, Izuku se despidiera de ella y le deseara suerte, sabía que ahora aquello no pasaría. Se dejó caer en la entrada, llorando.

¿Porque se había ido?

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-Ema. Ten respeto, es tu padre.-Le regaño.

-No lo es.-Grito con desenfreno.-Ese hijo de puta ya no lo es.

-¡Ema Bakugou!-Grito enojado Izuku.

-¡Ema Midoriya!-Grito de vuelta, haciendo que la cocina, que estába prendida, alzará las llamas.

Izuku dirigió la mirada a la cocina y luego a su hija, con decepción.

-Es tu padre, quieras o no.

-¡¿Porque lo defiendes tanto?!-Grito su hija de 15 años, con los ojos a punto de llorar.

-¡Porque lo es Ema! Es tu padre lo queramos o no y si el no esta aquí, no significa que no lo sea. No seas igual a él. Que ve las cosas pero las niega igual.-Comento Izuku recordando como negaba que Ema era su hija cuando era obvio, solo era cosa de mirar el cabello de la chica y su actitud.

Para Ema ser comparada con su padre era el peor insulto. Así que frunció el ceño y no dijo nada más sobre la clara infidelidad de su padre y se marchó a su habitación.

Había sido consciente de la entrega de ropas de esa chica, que creyó que Izuku era el compañero de piso de Bakugou.

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Deku cumplía los nueve meses cuando alguien toco la puerta. Grande fue su sorpresa cuando la madre de Bakugou estaba al otro lado.

-Buenos días, Izuku.-Saludo con una sonrisa de dudosa autenticidad.

A Midoriya le iba dar un ataque y tuvo que sostenerse del pómulo de su puerta para no caer ¿Que hacía ella aquí? No era que no la quisiera, pero dado las circunstancias. Pensó tocando su estómago.

Inko no había dejado que Izuku escuchará la conversasion, pero el peliverde tenia otra intención.

-Es correcto que se casen. Sabes lo difícil que es ser padre soltero en Japón, o madre. Como quieras llamarlo.-Resto importancia La mujer de cabellos rubios.

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Katsuki despertó de golpe al sentir su celular. Se había quedo dormido luego de seis latas de cerveza, las boto al suelo y pateó algunas. Descolgó.

-¿No vendrás a nuestra cita?-Pregunto alguien detrás de la línea. El chico frunció el ceño. Echo la cabeza hacia atrás, apoyándola en el respaldo del sofá.