Pensamientos Del Alma.

Parte 3* (1/3)

*Suspira xd* Dios… esta parte será tan larga y emotiva, tendré que dividirla en tres alv. Creo que son realmente pocas las personas que saben la historia entera, pero hoy, estoy dispuesta a explicarlo todo a detalle. Así que, audífonos al oído, pongan las canciones más tristes que tengan y… a leer. c:

(Creo que ya voy a llorar y ni siquiera he dicho nada xd)

Cambiaré el nombre de los personajes que aquí aparecerán.

Empecemos.

En vacaciones de 2016, mi amiga Daniela me contó que había conocido a una chica que ahora le gustaba mucho, pero que no sabía qué hacer porque se le iba a declarar (realmente no me acuerdo muy bien pero es bastante parecido a lo que pasó xd). Todos éramos de México, pero diferentes estados. Mi amiga y yo de San Luis Potosí y la chica que ella conoció es de Tamaulipas. El punto es que yo empecé a hacer de "Cupido", ya que sabía que Daniela era un poco insegura con ella misma. Por lo que le pregunté por su nombre y ella solo dijo "Ángela", con saber eso y de dónde era, me bastó para descubrir su Facebook (El FBI le llamaban jaja). Cuando… vi las fotos de Ángela… damn, era realmente bonita, pero no, yo no tenía la intención de nada mas que de hacer feliz a Daniela y punto.

Le mandé mensaje a Ángela. Un "soy amiga de Daniela" marcó el comienzo de una etapa que me gustó tanto como me dolió… (así es, la pequeña e inocente Alessa ni siquiera dijo hola v:). Ella respondió al instante y comenzamos el… ¿Proceso De Relación? Que tenía como objetivo principal que Daniela y Ángela fueran felices juntas. Como no quería tener problemas de celos o algo, me reservé bastante de hablarle a Ángela sobre cualquier cosa que tuviera que ver conmigo, esto desafortunadamente me salió al revés, ya que a ella eso le resultó misterioso e hizo que llamara su atención. Iba todo bien… hablamos por un rato pero luego decidí dejarlo hasta ahí, ese para mi iba a ser el último mensaje que le mandara hasta que no pasara una emergencia y… oh vaya, la emergencia ocurrió al día después.

No se puede cambiar lo que está destinado a pasar. Es por eso que las coincidencias no existen.

Ahí va Alessa Cupido a resolver los problemas del amor de esta feliz (aunque no por mucho) pareja.
Aquí es cuando Ángela me hace un chiste que cambia por completo la relación que teníamos:
A: ¿Me pasas tu número?
Yo: No tan rápido, primero una cita ¿no?
A: Bueno, ¿quieres que lleve lubricante?
Yo: …
Le pasé mi número para poder hablar por WhatsApp, aquí seguimos haciendo chistes pero ya no tan pasados de la raya (pues recordemos que Ángela y Daniela estaban "quedando").
Aquí ya no tengo mucha idea de los tiempos, no sé si pasaron días o fue amor a primera vista, lo único que sé es que Ángela y yo nos enamoramos perdidamente… o eso creía.

Un día me enteré que Ángela ya era novia de Daniela, a mi me daba muchísima rabia ya que yo amaba a Ángela, pero ella aún tenía los ojos en otra chica. Recuerdo que esa vez me porté inmadura con ella e hice que se enojara, me arrepentí de eso inmediatamente pero no pude hacer nada para remediarlo.

El tiempo pasó y llegó el día que marcaría mi vida… tal vez para siempre. Eran las 8:42 p.m. del día 3 de agosto de 2016, recién acababa de decirle "sí" a la chica de mis sueños, todo era color de rosa, todo era perfecto.

El día siguiente peleamos xd. Fue una estupidez de celos, pero supongo que eso era solo una pequeña señal de la tormenta que se avecinaba.

Los primeros tres meses pasaron rápido, pero mis emociones subieron, bajaron, estuvieron por aquí y por allá, ¿a que se debió esto? Bueno, yo me pasaba las noches en incertidumbre, pensando que tal vez Ángela se quedaría con Daniela y no conmigo. Verán, yo no tengo una autoestima muy alta, muchas veces dudo de mi misma pero he aprendido a controlarme.
Recuerdo muy bien un día por la noche, Ángela y yo estábamos en una llamada, salió el tema de si se quedaría conmigo o con ella (alto ahí, sé que estarán pensando que soy una idiota por soportar a alguien así, pero bueno, eso ya lo sé). Me dijo que no estaba segura, "ambas tienen lo suyo". La llamada terminó y yo, sentada en el sillón, viendo hacia la ventana, empecé a hacerme pedazos de la manera más lenta y dolorosa posible.