Un amor como la guerra.

1.

Era el invierno de 1942, la segunda guerra mundial estaba en pleno apogeo. Varias tropas iban y venían a través de varios puertos para comunicar las distintas zonas de batalla, entre una de esas tropas se encuentra el protagonista de la historia que nos atañe en esta oportunidad, Taylor.

Si tuviera que describir a este simpático joven seria: Un chico rubio, alto (1.85 m), tez blanca y originario de Hamburgo. Nació un 14 de Junio del año 1917, actualmente tiene 25 años y sueña con vivir hasta el fin de la guerra para poder volver a casa junto a su hermano, la única familia que le queda.

Es un Domingo por la tarde, cerca de las 6:00 pm para ser exactos. Taylor está descansando en un campamento ubicado a los alrededores de la ciudad de Stalingrado al sur de Rusia.
La tropa con la que el se mueve esta planeando una batalla para la conquista de la ciudad que tenían cerca de ellos. Había tensión por parte de todos, nadie sabia que iba a surgir de semejante conflicto. Algunos aseguraban que ganarían, otros, que morirían en el intento, Taylor por su parte está intranquilo, quería cumplir la promesa que había hecho un año atrás con su hermano.

Cabo: ¡Hey! No te quedes dormido Taylor, si te llegan a ver en ese estado te pondrán a correr por toda la zona.

Taylor: ¿Eh? Tranquilo, estoy en mis plenas facultades, no me atrevería a quedarme dormido sabiendo el riesgo que conlleva eso.

Cabo: Oye...no sabes a que acuerdo están llegando? Me tiene preocupado desde hace rato.

Taylor: No lo se, solo espero que escojan una sabia decisión, varios de nosotros tenemos inquietud de lo que pueda llegar a ocurrir.

Cabo: ¿Crees que todo saldrá bien?

Taylor: No lo se cabo, quizás todos triunfemos y lleguemos a nuestro hogar como héroes, o quizás todos moriremos en el intento...

Cabo: Eres muy directo con tus respuestas no lo crees? Como sea, cambiemos de tema, porque nuestra estadía aquí va para largo.
Dime ¿Tuviste alguna chica especial en Hamburgo? ¿Eh?

Taylor: Mira cabo, estamos en plena guerra, muchas muertes pasan día a día, la gente muere de hambre, y tu pensando en algo tan inútil y redundante como el amor. Yo no tengo tiempo para esas cursilerías.

Cabo: Disculpadme... No volveré a tocar ese tema...

Taylor: Pff...esta bien; no realmente, en el tiempo que viví allá jamas encontré a mi pareja ideal. Quizás luego de la guerra encuentre a la persona indicada.

Cabo: Eso espero Taylor, por mi parte tengo a mi prometida allá en Berlín, es una bella dama con cabello color castaño, ojos azules y sumamente hermosa.

Taylor: Eso suena muy bien cabo! Ya veras que ella te esperará el tiempo que sea necesario.

En ese momento salen de la carpa central los generales de la tropa e invitan a todos para que se reúnan de inmediato. Todos con cierta preocupación se acercan a escuchar el informe.

General: ¡Soldados! Hemos llegado a un acuerdo, otra tropa esta esperando del otro lado de la ciudad de Stalingrado, y, dentro de un par de semanas, atacáremos la ciudad.

En ese momento los murmullos no se hicieron esperar, esta decisión era radical ya que, desde hace tiempo, el ejercito rojo vigilaba dicha ciudad.

De entre todos los rostros preocupados uno resaltó con cierta inconformidad y se propuso a hablar.

Soldado: ¡No pueden hacer eso! Nos van a matar a todos! No piensan que nosotros tenemos familia y gente esperándonos? Acaso nosotros no importa...

Y, como era de esperarse, una bala cruzó el corto trayecto que había entre el soldado y el general, perforó el pecho del inconformista y este cayó sobre un charco de sangre que él mismo había formado.

General: ¿Alguien más tiene una objeción?

Ni un alma se atrevió siquiera a respirar o parpadear, sus vidas corrían peligro, y sabían que morirían, si no es por el ejército rojo sería por su propio general al mando.

General: Esta bien, partiremos mañana a rodear la ciudad, preparen sus cosas, mañana los quiero a las 400 horas despiertos. Eso es todo.

Ya eran cerca de las 10:30 pm cuando todos se metieron a sus carpas a dormir. Todos compartían una con un compañero  que había sido asignado antes de partir.

Ahí estaba Taylor, pensando en la pregunta que le había hecho el cabo hace unos momentos.

Taylor: (pensando) Maldito cabo, me dejó pensando acerca de esas cursilerías...aparte, es raro que para un chico de mi edad no haya tenido una novia tan siquiera, ¿será que simplemente el estallido de la guerra me arrebató todo pensamiento acerca de eso? No estoy seguro si algún día encontrare a ese amor, solo se que, a la persona que escoja será la indicada.

Taylor solo puedo dormir unas cuantas horas, pues perdió mucha parte del tiempo pensando, y quizás, deseando.

Hello bitches! Que pasó con la otra historia que estabas haciendo? Paso que me quede sin ideas :v pero esta historia prometo terminarla :). Ya se que quizás ya se  habrá contado esta historia pero de todo corazón les digo que esta idea me llego a la mente. No plagie nada conscientemente xd.

Actualizo todos los vier... cuando pueda (tipo HolaSoyGerman pero mas hardcore) Nos leemos luego.