Traumas

XXI.

Carl POV
"Quédate esta noche y así podré mostrarte de qué, mis sueños están hechos por que he estado soñando contigo"

Salí de mi celda hacia el pabellón en el que ocultaba a Alaska.

Cuando pase, enfrente de la entraba una chica de ma a o menos 14 años de encontraba golpeando con desesperación

-Por favor, ayúdame

Dudé un poco pero, después abrí la puerta.

La chica era rubia- Rubia oxigenada, nada que ver con Alaska-y tenía unos ojos verdes.

-¿Mordida?

Negó

-¿Nombre?

-Hana

-Te llevare con mi padre, sígueme

Camine hasta llegar al la celda de mi padre.

-Padre, Ella se encontraba pidiendo ayuda en la entrada de la prisión

Mi padre se encontraba caminando en la celda de un lado al otro.

Al escuchar mis palabras volteó en seco.

-Adelante, Te puedes ir Carl

Hana entro

"Si, señor presidente"

-Okay

Salí.

Camine hasta llegar al pabellón 3-A.

Alaska se encontraba dormida, mordí mi labio ante tanta ternura.

-¿Alaska?

La chica abril sus ojos dejándome ver esos hermosos ojos color chocolate.

-Carl

Se levantó y me abrazo.

-¿Qué ha pasado?

- Una fiebre-empece a contar con los dedos-Chica nueva y creo que eso es todo

Pide notar los ojos de celos de Alaska

-Déjame decirte que la chica nueva está buenísima

-¡Carl!

Estalle en risas

-Estaba jugando, tu eres la única

Se sonrojó

-Eres un idiota

-Obvio

Alaska estornudó

-Salud

-Gracias

Otro estornudo más fuerte, Al retirar la mano de su boca, pude notar que salía sangre de ella

-No, Alaska

Me miro con confusión

-Ven

Tome su otra mano y jale de ella, a mitad del camino, tropezó, la cargue y la lleve hasta donde se encontraba el doctor el cual, nunca me preocupo su nombre.

Toque con desesperación

El doc. salió, al ver a Alaska en ese estado la cargo y llevo hasta una celda.

Alaska estaba inconsciente, tenía los ojos cerrados, estaba pálida, sus labios, que antes eran de un rojo natural, ahora estaban de un gris irreconocible.

-Carl, te tendré que pedir que salgas

Salí de la celda

"La perderé, como perdí a mi madre, La perderé"