Stiles ya estaba cansado de los maltratos de Derek. Sus amigos ya no aguantaban la relación tóxica que tenían. No eran sanos, no eran buenos compañeros.
Scott fue uno de los primeros en desaprobar su relación, y en sospechar que Derek le pegaba.
St...
Hoy empezábamos las clases en Beacon Hills High School, a petición de Luke y mía. Era una secundaria bastante buena, de primera a ser verdad. Aunque teníamos la opción de mejores escuelas, no estaban cerca de casa, y tampoco del bosque. Hablemos un poco de Luke, y de mua. Luke era un chico de 1.92, bastante alto para sus 16 años, con unos lindos ojos que a veces eran verdes y otras azules. Tenía músculos por todo el entrenamiento que hacía cuando salíamos a correr o cuando nos entrenaba el tío Scott. Yo en cambio media 1.78, y no estoy tan marcada como Luke, pero definitivamente tengo lo mio gracias a todo el ejercicio. Mi cuerpo es como un santuario para mí, lo cuido como si fuera un pequeño bebé y yo su madre. Tengo unos pechos bastante grandes. Siempre tuve trasero grande, aunque ahora mi trasero era un poco más grande. Felicitemos a mi abuelo John que le heredó el trasero a mi mamá Stiles. Me cambié de ropa y me observé en el gran espejo que tenía, acomode mis medias negras. Las faldas cortas siempre lucieron bien en mi
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-Mi alma, ¿ya nos vamos? -Luke apareció, me miró y soltó un silbido, reí. Lo adoro. Luke es mi alma gemela, o eso decimos. Somos tan unidos como iman y metal.
-Vámonos. Tenemos una escuela que gobernar. -sonreí de lado, bajamos las escaleras de mi casa- Adiós papá. Le di un abrazo y un beso en la mejilla a mi padre. Quizás Dean no es mi verdadero padre, pero al otro no lo conocí y Dean me crió desde que soy una pequeña lenteja en el estómago de mamá, entonces es como mi padre.
-Adiós bebé. -se despidió mi padre, aunque oí como hablaba con Luke "-no quiero que las chicas que no conozcan se acerquen, sabes que no me agrada lo desconocido, Luke."
-Adiós mamá. -mi mamá, Stiles, me dio un beso en la frente.
-Adiós cariño. -dijo sonriendo dulcemente- ¡Qué les vaya bien en la preparatoria! Caminamos hacia el auto de Luke, pues. Él conducía, y aunque yo tenga licencia, mi papá todavía no quiere que conduzca. Dice que cuando tenga un mejor aprendizaje, ya podré conducir. Pero, no me importa, más tiempo con Luke.
-¿Lista para deslumbrar? -preguntó Luke sonriendo mientras me abría la puerta y me tendía la mano.
-Yo nací para deslumbrar, querido. -tome la mano de Luke mientras sonreía arrogante. Luke abrió la puerta y entramos, mis caderas se movían naturalmente cuando camino. Crucé miradas con ella, el recuerdo de mis manos recorrer el cuerpo de la morena, sus manos tocar todo mi cuerpo. La sensación de nuestros cuerpos juntos. Hola mi dulce chocolate, pareces sorprendida de verme, espero que te guste mi estadía aquí. Sonreí traviesa y camine por al lado de ella.
-Hola Jess. -susurre para ella cuando estuve a su lado. Vi cómo su piel se ponía como la de una gallina, y eso me estremeció, Jessica es muy linda, piel algo bronceada, pelo ruloso, buen cuerpo, daría lo que fuera para salir con una chica como ella. Reí internamente, creo que me gustará mucho quedarme aquí.
Suena la campana
-Hola vaquera.
-Mary, ¿qué haces aquí?
-Um, bueno. Queriendo terminar la preparatoria, así puedo conseguir un buen título e ir a Stanford, graduarme y tener una buena vida.
-No intentes distraerme, Stilinski. -Jess me apuntó con un dedo índice.
-¿Como esta tu mamá? -Aunque no lo parezca, fue una pregunta honesta. Explicare un poco por si no están entendiendo. Jessica y yo tuvimos algo en el verano, y en el verano pasado también. Es como si estuviéramos en algo sin estarlo. Me llevo a conocer a su familia, y ella conoció a Luke. Realmente conectamos bien, pero nunca formalizamos nada.
-... Bien, dice que cuando quieras vengas a casa, pero no estamos hablando de eso. ¿Qué haces aquí?
-Ya te lo dije. -canturree.
-Ugh, eres irritante a veces. Reí y nos quedamos viendo.
