Sobre Mi Ciudad

Conozco Lugares

- ¿Alguna vez en su vida imaginaron que ese viaje al mirador nos llevaría a esto? - les pregunte a todos mientras nos dirigiamos al caracol del buzón. Y es que todas nuestras aventuras juntos comenzaron con ese inocente y simple ida al mirador de la ciudad. Un día cualquiera, no teniamos tres clases seguidas así que de la nada propuse la idea de ir a el mirador, lugar donde la vista realmente es grandiosa, puedes ver toda la parte medular de la ciudad, además de que la calma en el lugar es otro punto a favor que tiene. Ese día todos fuimos, unidos, fue algo que evoluciono hasta llegar al punto en el que nos encontrábamos, buscando estampas de caracoles por la ciudad. Desde ese día en el mirador han pasado ya 23 aventuras de exploración que habiamos hecho, y con esta... 24.

- Si hablas de buscar caracoles por la ciudad inentando averiguar que relación tienen estos con la frase "24 Como la Noche Buena" y una chaqueta de mezclilla, créeme que jamás lo imagine - respondió un tanto sarcástica Dana, creo que ella en una parte de si creía que todo esto era bobo, lo podía leer con sus comentarios, como si solo fuera por el hecho de que el resto vamos.

- Yo tampoco lo imagine - respondió Carol sonriente - pero es mejor que estar solo acostada comiendo palomitas -

- No hay día en el que no saques a flote la palabra palomitas - dijo Liv, y después solto un carcajada, ella hace de la mayoría de cosas bromas un tanto bobas, pero que al fin de todo la mantienen cuerda y a nosotros igual.

- Listo ¿Y el caracol? - dijo Frida confusa - Se supone que esta aquí ¿No?

Habiamos llegado al buzón y no estaba aquel caracol que Carol nos aseguraba haber visto, será que ahora si estabamos enloqueciendo.

- La semana pasada aquí estaba, lo vi - respondió Carolina desconcertada, más bien todos estabamos desconcertados - Justo donde está esta mancha blanca, ahí estaba-

- Parece que ya lo quitaron - dijo Dana alimentando su desinterés.

- O quizá solo lo taparon ¿No creen? - dijo Iker mientras comenzaba a quitar la pintura blanca rascandola con una moneda, el solía ser muy ingenioso algunas veces, como si tuviera pequeños episodios de gloria.

- Cierto - agregué - hay que quitar la pintura de encima -

Así fue como después de unos minutos de que todos rascaramos, y que la gente al pasar se nos quedará viendo como locos logramos observar aquel caracol de dos cabezas, entre ambas habia una separación de unos 90° y este caracol era considerablemente mas pequeño que el que vimos en la casa abandonada, por mucho llegaria a tener 15 cm de alto y 10 de ancho. Pero aún asi tenía algún significado y estabamos dispuestos a buscarlo.
Ya teníamos la foto y ubicación exacta de dos de los seis caracoles, en tan poco tiempo encontrar esto era alentador.

Y así partimos en busca del tercer caracol, el que nos quedaba más cerca era el de el sendero, pero después de encontrar los otros dos caracoles que Carolina había visto aun faltaban otros 2, que podrían estar en cualquier parte, a lo cual estuvimos atentos durante el camino en busca de algún otro caracol que viéramos.

- Alex, ven - me dijo Adrián en voz baja haciendome señas discretas.

- ¿Qué pasa? ¿Todo en orden? - le pregunté, vi en sus ojos una gota de miedo aun, como si lo pasado la noche anterior en el río le dejara secuelas.

- He tenido pesadillas, no pude dormir en toda la noche. Creo que esto esta mal - me dijo titubeante, se que hablaba en serio, no acostumbra hacer bromas con temas de este tipo.

- ¿Por qué? ¿Qué te causa inquietud? - le pregunté angustiado.

- Soñé que alguien habia muerto en el río, pues ayer al recordar bien lo ocurrido... creo que vi sangre en el agua, que se disipo con la lluvia y el agua del río - me dijo bastante temeroso, como si estuviera viviendo ese momento de nuevo.