Capítulo 3

197 13 0
                                    


- Bueno pues mira. Tu trabajo, es un poquito mas difícil que el de cualquiera de aquí. Pero no te me vallas a espantar.

- Ok, la verdad estaba apunto de salir corriendo- volvimos a reír.

- Eres muy buena haciendo reír. Bueno, emm, primero. Te voy a dar este Ipod. Desde aquí, puedes controlar todo. Y cuando digo todo es todo. Desde aquí puedes ver las cámaras de vigilancia, puedes hacer llamadas, puedes controlar lo que hace cada uno de los empleados. Todo. Puedes hacer absolutamente todo lo que el Señor Mateo te diga. Eso es todo.

- Ok. Y ahora que ago??

- Pues entra ahí con el Señor Mateo y dile que ya te di tu uniforme y el Ipod, el se encargará de lo demás.

- Ok- me diriji a la puerta, estaba a punto de abrirla.

- A una cosa más.

- Que sucede- dije acercándome a ella.

- Siempre tienes que decirle Señor Mateo, y nunca le contradigas. O te irá mal.

- Ok, gracias por ponerme más nerviosa de lo que ya estaba.

Las dos reímos.

- Perdón. Bueno ahora si ya puedes entrar.

- Ok.

Me diriji a la puerta y la abrí.

- Puedo pasar??

- Adelante.

- Susana ya me dio mi uniforme, y mi Ipod. Me dijo que usted se encargaría de lo demás.

- A sí es. Este será tu escritorio. Puedes hacerle lo que quieras.- me dijo señalando un escritorio más grande que la mesa de mi casa. Con una computadora súper grande un celular al lado, un teléfono. Papeles, y más papeles, yyy, si adivinación más papeles. Que aburrido.

Me acerque a mi nuevo escritorio, todos los papeles estaban desordenados.

- Que tengo que hacer- dije dejando el Ipod en el escritorio.

- Primero, tienes que ordenar todos esos papeles. Todos están enumerados. No será mucho problema.

- Ok.. Y luego.

- Luego, tienes que acomodar mi agenda. Pero eso más tarde.

- De acuerdo, Señor Mateo.

Comencé a ordenar todo. Tengo la gran suerte de que siempre ordeno rápido y más cuando están enumerados.

- Acabe!!!- dije gritando, para que todo el mundo me escuchará. Ok, aveces exagero mucho.

- Hay, pero no grites. No estoy sordo.

- Lo siento- dije sonriendo avergonzada.

- Bueno ahora, prende el Ipod y entra en agenda.

Hice lo que me dijo.

- Listo- le dije

- Ahora enciende la computadora y entra en archivos.

- Listo-

- Eres rápida nena.

Eso me puso roja.

- Ahora que ago??

Entra en el archivo que dice agenda.

- Listo

- Ahora, pasa todos lo que dice ahí a la agenda del Ipod

- Ok

Pase todo, creo que no me tarde ni 15 minutos

- Ya.

La Empleada (Abraham Mateo) HOTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora