CAPITULO 28

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El despertador empieza a sonar como siempre, le doy la imagen de una mujer gritona, no para de sonar y me desespera los nervios, me levanto de golpe y le doy un buen golpe para que se calle, sinceramente no me desperté de muy buen humor, vi como la luz de la mañana entraba por mi ventana, me parecía fastidiosa, me dirigí al baño un poco desanimada del día, y por lo de ayer no tome en cuenta cuanto tiempo dure en bañarme, salí y me cambie así, algo cómodo combinado.

El despertador empieza a sonar como siempre, le doy la imagen de una mujer gritona, no para de sonar y me desespera los nervios, me levanto de golpe y le doy un buen golpe para que se calle, sinceramente no me desperté de muy buen humor, vi como l...

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En cuanto fui al espejo me hice una moña ni me cepillé el cabello, estaba desanimada, me vi en el espejo, parecía un árbol ya que estaba toda de verde, mi subconsciente decía esperanza, durante años los psicólogos piensan que uno se pone cosas verdes por ser positivo. En este momento me da igual, cada una de esas cosas, vi mi rostro y tenía una pequeña marca que me quedo por el golpe que me dio Jimin, tan solo recordarlo me revolvía el estómago, tomé mi mochila y me dirigí a la cosina.

En cuanto baje no tenía ni un poco de hambre, pero ya era costumbre, fue extraño vi a Greta en la cocina, bueno solo la veía aquí en las mañanas cuando Bobby estaba.

Yo: Buenos días Greta –seca

Greta: Buenos días señorita _____ -me sonrió

Ella estaba terminando de ordenar unas cosas de pronto se dio la vuelta y me observo, su rostro cambio... estaba como angustiada, se dirigió a su bolso y saco una polvera.

Greta: Linda siéntate –señalando el taburete

Le hice caso, sabia a donde iba todo esto, saco la esponja unto un poco de make up y comenzó a ponerlo en mi rostro, en ese momento logre observar a Greta, ojos cafés claros, piel blanca, cabello café claro un poco corto, era flaca y a juzgar por las arrugas del rostro debe tener unos veintisiete años. Nunca la había mirado, determinadamente, en cuanto escucho a Jimin saludo a Greta y fue a recoger una manzana, y se dirigió hacia el auto, me levante del taburete casi saltando de el.

Yo: Gracias –sonreí

Greta: De nada –suspira

Tome mi mochila, y Jimin ya estaba por arrancar, corrí al auto abrí la puerta y me puse en el asiento del copiloto, de nuevo una gran ida sin una sola palabra, siento que tenía muchas cosas que decirle, pero a la vez no quería hacerlo, llegamos al colegio, no estaban los chicos, yo me fui directo al salón Audiovisual, hoy veríamos una película con el curso ya que tuvimos el mejor promedio en Biología, entre a la sala audio visual de reojo repetía cada asiento hasta que alguien levanto la mano y vi era Ken, corrí hasta la quinta fila en los asientos del medio.

Yo: Hola Ken –saludando cortésmente

Ken: Hola ____ -sonríe

Me senté a su lado sin decir una palabra, hoy no tenía humor de nada, en cuanto vi cómo me miraba Ken de reojo, claro el Make up puede tapar el golpe pero no del todo, él no me dio ni una pregunta, en eso entro la profesora y comenzamos a ver "La vida es bella", es una buena película pero a la vez muestra algo irreal, no todo es lindo peor los hombres, la mayoría son como Jimin, nunca lucharían por el amor de una, solo se quedan ahí parados como estatuas esperando que una decida hacer algo.

Secreto de hermanos (Jimin & Tu) AdaptaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora