happy easter, yoongi!

5.4K 629 197
                                    

❛   E a s t e r   ❜

—————————

《 Donde Seokjin compra chocolates para Yoongi en Pascua 》

【 🐰 】


  — Buenos días bebé.

  El pelinegro se acurrucó contra el amplio pecho de su novio, disfrutando de la calidez de su torso. Murmuró algo intelegible, todavía muy adormilado, haciendo reír al mayor.

  — ¿Te había dicho que eres adorable al despertar?— preguntó contra su cabello, sus manos acariciando la piel lechosa del menor, haciendo trazos imaginarios por toda su espalda.

  — Idiota. — susurró, para luego rodear la cintura del mayor con su brazos y frotar su mejilla contra él.

  — Siempre tan dulce, Yoonnie. —dijo el rubio entre risas, para luego apretujarlo más contra su pecho, algo que pareció agradarle al pelinegro, ya que sonrió contra su pecho y se quedó ahí, con sus ojitos cerrados y sus labios entreabiertos.

  Lindo. Era la única palabra que podía pensar Seokjin mientras observaba el rostro adormecido de su dongsaeng, el cual parecía muy contento de estar en su cálido pecho. Sintió como enredaba una de sus piernas en las suyas, dejándolo totalmente inmovilizado. Suspiró con suavidad, y besó su frente con delicadeza, sintiéndose estúpidamente feliz.

  Feliz de poder despertar junto al chico del cual estaba enamorado, feliz de escuchar sus insultos mañaneros y sentir su tersa piel bajo sus dedos. Estar juntos había sido complejo, pensó el rubio mientras recorría con mucha delicadeza la barbilla de su novio, el cual había vuelto a dormirse. Pero daba igual, daba igual todo con tal de sentirlo así de cerca, tan tibio y feliz junto a él. Porque Seokjin sabía que Yoongi lo amaba tanto como lo hacía él, y eso era algo que lo hacía sentir cálido.

  Bufó al ver la hora, era domingo y no debía ir al trabajo, pero aún así le hubiese gustado levantarse temprano para comenzar a preparar el desayuno y ordenar un poco.

  Miró el calendario, y abrió un poco los ojos al recordar que era Pascua. Era chistoso, pensó el rubio, ya que esa celebración era completamente extranjera, pero su cultura parecía siempre dispuesta a adoptar nuevas celebraciones con tal de vender más. Observó nuevamente a su novio, el cual estaba haciendo ruiditos al dormir, sacándole una amplia sonrisa.

  Tal vez podría ir a comprar unos chocolates para Yoongi, a fin de cuentas sabía que en el fondo –y aunque el menor insistiera en que no le gustaban– Yoongi amaba los chocolates con una taza de café caliente. De pronto, el estar acurrucado con Yoongi, tomando café y comiendo chocolates se le hizo irresistible al mayor.

  Movió su mano hacia la pierna del menor, corriéndola con lentitud. Yoongi frunció un poco el ceño, pero luego volvió a relajarse contra su pecho. El mayor se separó lentamente, rogando por no despertarlo. Agradeció el que el azabache tuviese el sueño un poco pesado, y se levantó de la cama en silencio. Arropó a su amado, cuidando de dejarlo bien cubierto, y se vistió en silencio, saliendo en puntillas de la habitación.

  Se colocó un abrigo, ya que a pesar de que el invierno ya había terminado, seguía estando bastante frío para su gusto. Tomó su billetera y llevó una de sus bolsas de tela, pensando en pasar al supermercado y comprar algo para preparar un delicioso desayuno.

happy easter, yoongi! ;; jinsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora