Capítulo 2

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De acuerdo estaba sumamente nervioso pues su primer día de clases estaba a punto de comenzar, era normal que un chico sintiera nervios pero el iba vestido de chica. Estaba muy seguro de que se caería de no ser porque Hinata lo detenía, Nishinoya iba adelante de ellos muy conforme con el resultado de su creación. El problema era que no estaba seguro que todos en esa escuela se tratarán el cuento de que el es una chica pero tenia que aguantar se las ganas de gritar y actuar como chico.

—Suga-san ¿se encuentra bien?, no se ve muy bien de salud— preguntó Hinata al momento que el mencionado lo volteaba a mirar.

—Hinata no lo hagas arrepentirse de la apuesta— tomó la palabra Noya antes de que Suga fuera a contestar.

—Estoy bien solo díganos que aún no puedo asimilar que en verdad estoy haciendo esto, es raro solo eso— sonrió con nerviosismo bajando la mirada —. No estoy "acostumbrada" a que se me queden mirando. Además por suerte soy una chica plana,  seria más incómodo que tuviera unas naranjas o melones en el pecho.

Noya en bolso una sonrisa para darle un leve golpe en la espalda para agregar:

—Te miran porque eres una preciosa chica, hasta Hinata se sonrojo cuando te miro al salir de tu casa. Es natural pero solo tienes que acostumbrarte y listo — explicó haciendo que Suga comenzará a caminar —. Además no tienes porque tener pues lara eso me tienes a mi, compartiremos las mismas clases.

—Eso es lo que me preocupa— murmuró Suga al momento que Hinata aguantaba las ganas de reír.

Suga sabía perfectamente las locuras que pasaban por la cabeza de Nishinoya por lo que queria mantenerse alejado pero claro que seria algo bastante difícil.

—Suga-san ¿como debemos dirigirnos a usted?— llamó la atención Hinata mirándolo con curiosidad.

—Pues como la señorita que soy y con respecto al nombre pues Suga o Shoma como gusten llamarme por mi no hay problema.

Hinata asintió conforme. No era diferente a como era Suga aún con esa ropa, el seguía siendo el mismo, en el trayecto a sus respectivos salones Hinata se separo de ellos para quedarse en su propio salón claro no sin antes quedar que almorzarian juntos, Noya parecía tranquilo aunque era bastante obvio pues el no era el chico que vestia como chica ni actuaría como una por un largo rato.

—Este es nuestro salón— anunció el chico delante de la puerta que estaba semi abierta, era hora de la verdad.

—Así es— pronunció el de cabello color ceniza apretando la correa de su mochila.

—Puedes detener esto si quieres —su voz sonaba firme y seria, Suga lo miró —.  Puede que te arrepientas después

—Haré esto y no me arrepentiré —sonrió para abrir la puerta del aula.

Todos los que se encontraban dirigieron su mirada a la entrada donde ingresaba Suga y Noya.

—¿Son los alumnos nuevos?— preguntó el maestro mientras Suga asintió.—... Bien entren por favor.

Las miradas no se despegaban de ellos, claro que Nishinoya ya era conocido en ese colegio pero no la hermosa chica que se encontraba a su lado. Mientras tanto el profesor escribía los nombres de los chicos en el pizarrón haciendo que algunos se sorprendieran, Suga había bajado la mirada pues no se sentía con la fuerza de sostener la.

—Les presento a sus nuevos compañeros Sugawara Shoma y Nishinoya Yuū, Sugawara se mudo por motivos familiares mientras Yuū vuelve para seguir sus estudios, presenten se—  dijo el profesor para sentarse en su escritorio.

Suga miró a Nishinoya quien le hizo la señal de que el se presentará primero,  suspiró para después dirigir su vista al frente deseando que nadie se diera que cuenta del secreto que estaba guardando en esos momentos.

¿JUGAMOS DADDY? [DAISUGA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora