Dimple

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Era realmente algo de otro mundo; veamos como lo explico. Muerda era solo la sonrisa mas perfecta, sus hoyuelos eran simplemente eso que desearía ver todo el resto de mi vida.

Me volví adicta a sus hoyuelos, su rostro era todo aquello lo que yo necesitaba para sentirme completa.

Ella y sus hoyuelos me hacían vivir. Era nada mas que carne caminando muerta en alma y corazón; por que mi corazón latia pero no bombeaba sangre sino gasolina que simplemente necesitaba de una chispa para prenderse en llamas y convertirse en cenizas.

Era simple ella era mi motivo y razón de seguir. Me embobaba la manera en que me sonreía, a la perfección podía ver esos hoyuelos y recordaba que aun podía sentir; por que solamente por ese par de hoyuelos acompañados por su sonrisa perfecta me sentís viva.

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