El tiempo y la distancia logró separar a cuatro amigos, tras varios años ellos entran en contacto y marcan un encuentro, las cosas cambiaron mucho, cada uno tomó su rumbo, ya no son niños,¿todo volverá a ser como antes?¿confían aún el uno en el otro...
Después de viajar por al menos 7 días, al fin estoy aquí, la multitud de personas que pasan por mí me está comenzando a molestar, pero prometí que aquí no me metería en problemas, al menos no por ahora, mi objetivo es ir desde aquí al hotel, ya me preparé en el viaje, busqué en los mapas en donde queda el hotel una y otra vez para así no perderme y parecer un imbécil. La ciudad es muy agitada, el ruido de los vehículos se me hace levemente fastidioso, ahora mismo estoy pasando por un gran parque con un lago enorme y repleto de vida, luego de un rato caminando lentamente y observando todo, llegué al hotel sano y salvo. Dejé mis cosas en mi habitación luego de hablar con la recepcionista y me senté a ver la televisión, que malos gustos tienen aquí, sus programas son basura, tras aburrirme totalmente decidí salir a explorar la ciudad, caminé sin rumbo durante mucho tiempo y llegué a un lugar bastante raro, todo era obscuro, sombrío y apestoso, habían hombres enormes totalmente tatuados y musculosos, tenían un aspecto sucio pero misteriosamente atractivo, obviamente estaban consumiendo drogas, entré a la que parecía la casa principal entre todas las otras casas y allí pude divisar la decoración algo extravagante y fascinante, habían preservativos usados colgados de cuerdas en la pared, el piso estaba sucio y con un polvo gris, estaba lleno de esos hombres, varios de ellos comenzaron a rodearme,me parece que está será la paliza de mi vida, si salgo vivo, entonces un intimidante señor me habló con una penetrante y ronca voz.
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-¿Eres nuevo?- me dijo el caballero
Dudé de mí respuesta pero sin pensarlo mucho le respondí- solo estoy dando una vuelta- dije, por la expresión de sorpresa de todos creo haber sonado grosero. Los matones estaban listos para golpear me pero su jefe los detuvo. -calma chicos, voy a hablar con nuestro invitado afuera, no sé preocupen- dijo el con una sonrisa algo cínica. Lo acompañé afuera y sin previo aviso cuando me giré a verlo me escupió justo en el ojo, "limpié" mi rostro y lo mire indignado, esto no se va a quedar así, entonces sin pensar en nada golpeé el rostro del canoso, el me vió con una expresión que nunca olvidaré, creo que ya me metí en problemas.
-¿Crees que puedes venir aquí a robar información para el estúpido de Chuck, golpearme y salirte con la tuya, perra?- gritó. -Espera...¿me dijiste perra?, Creo que ahora tenemos un problemita amigo- le dije y me preparé para la pelea. El dejo escapar una carcajada y hizo lo mismo, comenzamos a luchar, quiero decir que estábamos empatando pero la verdad la mayoría de los golpes los recibí yo, me tiró contra los botes de basura,lugar al que pertenezco, y pude visualizar entre manchas borrosas a otros tipos que venían a golpearme, levante mi mirada y el tenía un arma apuntándole a mi cabeza, estoy perdido.
De la nada una botella de vino impacta la cabeza del hombre y el aprieta el gatillo.
