The reason (La razón)

Capitulo 9

Sábado eran las 12  de la noche cuando mi celular vibro, tenía un mensaje de David

“¿Ella te parece salir? Estará Leonardo y yo, claro”

Dudaba en acceder, realmente quería verlo

“él no quiere verme” conteste

“¡claro que si Ella! Leonardo te extraña demasiado” Recibí a los pocos minutos

“si me extrañara, me hubiera dicho, Gracias de todos modos” envié

“Leonardo no podía avisarte, no tenía internet…” recibí inmediatamente

Bien con eso había entendido…justo en este momento me sentía patética “¿cuándo?” envié

“¿te parece el lunes en la tarde?”

“Claro, ahí estaré”

Al dia siguiente había estado mensajeandome con David, era un chico con quien podía reír y hablar tranquilamente, ¿qué más podía decir? Era lindo y muy buena persona, sentía como si fuera menor a mí aunque tuviéramos la misma edad, sentía como si fuera alguien a quien debía de cuidar, ya se, apenas lo conocía, soy rara…

El lunes llego había estado rogándole a mi madre para que me llevara y lo había logrado, eran ya las 6..y ahí estaba, parada enfrente de una casa con rejas negras, los perros empezaron a ladrar, eran hermosos perros, pero me aterran los perros que ladran

-Hola Ella-me saludo un chico de mi edad y casi de mi estatura, tenía la cabellera lacia, demasiada perfecta, era realmente lindo

-Hola David-le sonreí y justo detrás de él salió Leonardo

-Ella…-dijo al mirarme-David llévate a los perros-le ordeno a su hermano y este llamo a los perros que aún seguían ladrando

Leonardo abrió la pequeña rejilla y entre- cuando tiempo-dijo abrazándome, ese abrazo que sentí derretirme…pensé que el abrazo duraría poco pero había sido demasiado tiempo-te he extrañado-me sonrió al separarse

-yo igual-le sonreí un poco ruborizada

-Ella…-me abrazo David con una gran sonrisa- ven pasemos a la casa-dijo guiándome a esta

Su madre estaba sentada en el comedor con la laptop, se veía joven con la cabellera alborotada de risos, me miro al entrar y la salude con un simple “hola” casi en un susurro

-¿y bien…?-hablo David interrumpiendo el silencio

-¿Qué quieres hacer Ella?-me pregunto Leonardo

-lo que quieran-conteste

-¿te parece si vamos a la plaza?-pregunto Leonardo

-claro, no hay problema-conteste

-¿oye mama podrías llevarnos a la plaza?-le pregunto Leonardo a su madre y esta asintió

En 5 minutos ya nos encontrábamos bajando de aquel coche, aún estaba atardeciendo…Leonardo, David y yo entramos a la plaza después de despedirnos de su mama…había mucho silencio y me parecía incomodo

-¿Cómo has estado Ella?-me pregunto Leonardo

Lo mire y le sonreí-bastante bien-confesé

-qué bueno, ha pasado tiempo-contesto Leonardo

-solo unos pocos meses-me encogí de hombros-no es tanto-

-Oigan iré a buscar unas cosas-aviso Leonardo mientras caminábamos