Capitulo 13

105 4 0
                                    

El mes paso más rápido de lo que yo me hubiera imaginado, David se había hido, seguía hablando con él pero no tanto como yo hubiera deseado…habían pasado 22 días desde que no me hablaba…había desaparecido de su mundo y yo me había propuesto lo mismo, mi vida volvió a lo aburrida que solía hacer, no me importaba…al menos eso creía…Leonardo había ayudado demasiado con subirme el ánimo, sus pláticas me alegraban el dia y sus tonterías igual, mi vida volvió a retroceder y las cosas volvieron a repetirse…tarde o temprano nuestras platicas habían vuelto ¿qué más daba?

Mi forma de ver mi vida había cambiado, las cosas habían cambiado, tenía que aceptarlo, yo había cambiado, tarde o temprano volvería al vicio, pero sabía que esta vez sería mucho mejor; Tenia que aprender a vivir con lo que viniera.

Leonardo y su novia terminaron unas semanas después, por una parte me sentía bien y por la otra me dolía saber que estaba mal, que sufría por ella, me dolía…él de verdad la amaba; sin embargo 3 semanas después todo volvió a la normalidad…las pláticas subidas de tono se convirtieron en algo más que mejor, disfrutaba cada madrugada y noche estar hablando con él, por mis venas corría aquella necesidad de dárselo todo, estaba dispuesta pero cuando la calentura se me pasaba el miedo a perder la virginidad volvía, leyendo cada parte de nuestros mensajes me preguntaba si era capaz de hacer todo eso, solo lo haría con él, de eso estaba segura, era mi mejor amigo y tenía demasiada confianza en él…pero en donde encontraría las fuerzas para decirle “hey soy virgen, ten cuidado” debía de odiarme si le dijera algo así…su odio me lo merecía después de mentirle sin embargo no encontraba la manera de decirle la verdad, estas pláticas había rebasado mis mentiras…

“¿qué te pasa?” le envié a Leonardo después de notarlo un poco molesto en los mensajes

“problemas” contesto

“¿Qué has hecho?” no había pensado muy bien las cosas al enviárselo sin embargo casi siempre hacia algo que molestaba a alguien

“no es nada, olvídalo” contesto a los pocos minutos

“cuéntamelo” insistí

“bueno…mi padre me regaño por oler a cigarro” contesto

“¿estuviste fumando? Pensé que ya no ibas  hacerlo”

“solo fue con mis amigos, no siempre fumo, solo cuando estoy con ellos” contesto

Sentí la necesidad de darle unas bofetadas, parecía que lo decía como si no fuera un problema, sentía la necesidad de abrirle los ojos pero ya no buscaba como

“deja de fumar Leonardo, en serio” envié

“solo cuando estoy con ellos lo hago” contesto

“no me importa, es en serio”

“creo que es mi vida y yo hago lo que quiero”

Esa había sido la gota que derramo el vaso

“perfecto, ya no me meteré en tu vida”

Rogaba porque suplicara pero sabía muy bien que nada de eso pasaría, apague el celular y decidí no hablar más con él, me dolía dejarlo, todo estaba tan bien y por una estupidez todo se fue a la mierda, era necesario definitivamente esto marcaria las cosas…me sentía mal pero mi orgullo era demasiado no me mostraría tan deprimida ante él, ya no correría por un perdón…no mas

1 semana

2 semanas

3 semanas

4 semanas

Ni un mensaje, aun nada y de pronto…. Entre mis menciones de Twitter apareció Leonardo, ¿una foto de lana del rey con cabeza de cabra? Una broma de su parte…no le conteste sin embargo debía de admitir que me reí…

The reason (La razón)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora