¬Mírame

66 21 9
                                    

No es una casualidad que nos hallamos juntados,

enamorados y apasionados cada amanecer.

No mires hacía atrás enojada,

ni mires adelante con rencor.

Mira más allá de mi mirada;

no soy una aurora,

ni tampoco una ilusión.

No soy el sol ni la luna,

soy el fuego de esta pasión.

No aspirarás acabar lastimada,

pues tú me lesionaste el corazón.

Todo comienza en armonía,

y termina en decepción.

Discúlpame por hundir tu vida,

en un océano sin pasión.

en un océano sin pasión

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La metamorfosis de mis palabras ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora