GALLINA VIEJA DA BUEN CALDO?

SUEÑO CUMPLIDO

Durante todo el trayecto a su casa yo estuve muy nervioso, ella estaba sentada junto a la ventana y parecía estar bien cómoda ahí, por mi lado yo agradeciendo lo afortunado que estaba siendo conmigo la vida o el destino, no podía creer que estaba en camino a la casa de tan bella mujer, era algo irreal para mí, mis olfatos podían sentir ese perfume erótico que emanaba su cuerpo, veía de reojo la forma tan perfecta de su silueta junto a la ventana, yo respiraba hondo solo para tener por más tiempo ese olor en mi memoria, sentía ese calor que recorre por tu cuerpo y que te hace estallar pequeños destellos de emoción que recorrían mis pechos, sentía como se me aceleraba el latir de mi corazón y por cada latido brotaban calor de mi piel, pero después de varios latidos empecé a sentir uno fuerte, ese latido que es como un pequeño salto de emociones, un latido fuerte que me debilitaba, no, no era un infarto, era el efecto de estar entusiasmado con ella, estaba sudando cuando escuche que me decía: Joaquín acá bajamos, Mi imaginación se hizo trisas entonces como vaso frágil y solo atine a preguntar, acá? si Joaquín me dijo, bueno me levante e hice espacio para que ella fuera delante mío, tomo la delantera y bajamos del bus, no era tan lejos su casa, una vez en el paradero, me dijo sígueme, muy bien dije, yo iba tras ella apreciando esas nalgas bien formadas y redondas que alimentaban mi imaginación lleno de morbo, tenía un impulso de ir cogerlo, darle unas nalgadas y hacer el amor con ella de manera salvaje! y gritar que me gusta! y que es muy hermosa! y que todos los días que he trabajado en esa pollería me excite tan solo viéndola! quería gritar eso ahí mismo, pero me abstenía; contenía toda esa emoción guardada dentro de mí, y solo caminaba, ella me pregunto si me sentía bien, le dije que sí, me empezó hablar de ella, me contó que vivía sola desde hace mucho porque fue muy independiente desde muy joven, pero algo me llamo la atención y es que caminando ya casi por llegar a su casa me dijo que algún día quizá tenga familia, yo tomaba cada palabra de ella y lo alucinaba con ella, quizá no era lo suficiente maduro como para atender ese concepto, idea o propuesta indirecta, quien sabe, yo solo era un muchacho común y corriente que en pinta apenas rozaba lo 6 de 10 y por compasión llegaba a los 7, pero tenía mucha actitud y personalidad, tenía mucha carisma y creo que eso fue lo que siempre acerco a las chicas, entre palabras y palabras llegamos al edificio donde viva, no acercamos a la puerta y como en todo edificio había un vigilante, este vigilante no era el típico vigilante de 50 años, gordito, con bigote, con su radio en mano, como dicen por ahí, este era un chilote, papucho de uno 1.80m de alto, con un cuerpo bien formado en el gimnasio y con una pinta de mujeriego que se notaba a leguas, saludo de manera morbosamente cordial a ella que más me molesto a mí, si era celos, pero ella respondió de manera normal y tranquila lo que me calmo, iba yo detrás y este vigilante me detiene, adónde vas? me pregunto con una cara de pocos amigos, escucho esto mi bella jefa y dijo, viene conmigo Carlos, su cara se transformó en sorpresa y pregunto atónito, el? si el, respondió ella, a ok señorita, pase joven me dijo con una cara de hipócrita, pasado esto seguí a mi bella dama y fuimos al ascensor, dentro del ascensor ella me pregunto si estaba nervioso, no, porque lo estaría? le respondí, no se quizá por que estas con alguien que conoces pero en un lugar desconocido? a lo que respondí , señorita Elizabeth vivo solo desde loa 14, ya casi nada me sorprende le dije, sonrió un poco y dijo llegamos Joaquín, salimos del ascensor fuimos al departamento 403, ella abrió la puerta y entramos.

Esta casa no era cualquier cosa, era la casa de una diosa, muy ordenado y limpio, todo en orden y bien acomodado, todo estaba en su lugar, el aroma de hogar que muchos desconocen, un aroma que sería el resultado del olor de su cuerpo y algo de perfume, era un lugar muy hermoso aquel lugar, las cosas estaban acomodadas de tal manera que tenías la sensación de que el departamento era grande, ella muy cansada quizá se tiro en su sofá y muy en confianza me dijo, Joaquín siéntate no seas tan educado, gracias dije y ella empezó a reírse, solo la mire y me dijo, Joaquín desde que te conocí es más desde aquella primera vez que llegaste a la entrevista nunca cesaste de decir, gracias, por favor, siempre tan respetuoso tú, pero te diré algo, ya estamos fuera del horario de trabajo así que relájate, me sorprendió esto ya que yo siempre acostumbro ser así, pero bueno ya que me habría más confianza me sentí libre y yo también empecé a bostezar de cansancio, ella se levantó y me dijo Joaquín saldré un rato a comprar acá en la esquina, te puedes ir bañando si deseas, ok, no se preocupe, entonces ella salió y apenas ella salió, abrí mi mochila, saque mi jabón, cepillo dental, mi crema dental, champo, e ingrese a la ducha que me indicó, entre rápido y me bañe, me seque con mi polo de trabajo, salí y mientras ella no llegaba me eché un poco de colonia, deje la ducha bien limpia como para que tenga buena impresión, incluso la seque un poco, me que descalzo y la espere sentado en el sofá, como cinco minutos después ella llego, y me dijo Joaquín, prende la televisión, luego me trajo unas sandalias y me dijo ponte estas, los vi eran de mujer, me miro sonrió y me dijo nadie te va a ver, solo me reí y me los puse, luego me dijo ben llamándome a su dormitorio, Joaquín acá esta la cama, acá vas a dormir tu y yo ahí, ok? bueno si deseas puedes dormir en el sofá, también es cómodo, depende de ti, mire un poco nervioso y le dije me quedo acá, me miro y me dijo ok, pero debes saber que creo que ronco, soltó unas carcajadas y me dijo la verdad no sé pero por si acaso, bueno te dejo me voy a duchar me dijo, salió de ahí se fue alistarse mientras yo me acomodaba, ropa por acá, mas ropa por allá, pijama y etc etc etc, luego de casi quince minutos entro a la ducha, yo estaba acomodando mis cosas, y de repente me entro una curiosidad enorme, fui a la puerta de la ducha a escuchar que hacía, lentamente me acerque a la puerta, y escuchaba la caída del agua, y cada vez que el agua dejaba de caer escuchaba el ruido que producía sus manos al frotar su cuerpo con jabón, imaginaba como sería el cuerpo desnudo de tan bella mujer, esos senos, grandes y redondos siendo frotados con jabón y el vapor de su piel perdiéndose por las ventanas, podía escuchar todo, y mi imaginación volaba, mientras mi imaginación volaba escuche que ya salía, asustado y desesperado me levante y corrí rápido a la habitación, sin pensar en nada me lancé sobre la cama y me tape como para que no sospeche nada, trataba de calmar mi respiración por los nervios, no me había visto así que todo estaba bien, oía los pasos de ella acercarse y entrar a la habitación, los oía más cerca y pensaba seguro que ahorita sale a cambiarse, pero no, los pasos venían a mi cama, y de pronto una mano coge la colcha y me descubre y seguido de eso su bello rostro, y me dice Joaquín , que haces en mi cama? no sabía que responder, me sonroje de vergüenza y sin palabras quise levantarme pero ella puso su mano sobre mi pecho, me contuvo, suavemente subió sobre mí y yo podía sentir el rose de sus nalgas en mi abdomen, me miró fijamente y se quitó la toalla, frente a mis ojos se descubrieron esos hermoso senos que hace mucho imaginaba, y eran más hermosos que no hay forma de que los describa, muy lento y tímido levante mis manos y acaricie ese pezones, y podía sentir que a ella le recorrían por el cuerpo esa sensación excitante así que empecé a acariciarlo más y luego ambos pezones, ella se inclinó hacia mí y por fin! pude besar esos dos pezones, ella lo disfrutaba podía sentir que ya estaba excitada , luego puse mis manos en sus nalgas y con un poco de fuerza las presioné ella lo disfrutaba y empezó a besarme, era algo soñado para mí, no podía creer lo que estaba pasando, entre besos y besos ella bajo por mi pecho, me beso el abdomen, y me quito los pantalones y la trusa, wow! pude sentir como de a poco ella empezaba a besar al muchacho, de apoco , hasta que en una de esas profundo, hasta adentro, sentía el rose de sus labios en mi pelvis, ella sabía hacerlo bien, besaba muy entusiasmada las pelotas, luego regresaba a chuparla, cogí su cabello y la sostenía con una mano y podía ver claramente su rostro mientras me chupaba el pene, así hasta dentro le decía, y ella muy complaciente lo hacía sin guardarse nada, luego se levantó vino mí y empezamos a besarnos muy salvajes, mientras eso sucedía ella puso esas nalgotas en mi pene erecto y wow! adentro, al sentirlo ella, gemía de placer y emoción, empezamos a sudar, ella subía y bajaba, se inclinaba hacia mí para que yo haga el trabajo, luego ella, entonces yo no quise quedarme ahí, así que me hice sobre ella y como ella conmigo empecé a recorrer su cuerpo a besos hasta llegar a su vagina, tenía el clítoris grande, así que empecé a besarlo, lo lamia muy excitado hasta que sentí ese retorcijón, ese momento en el que se le viene el mundo encima, se retorcía de placer y su cuerpo de estrujaba, era su orgasmo, un orgasmo clitoriano no contento con eso me propuse llegar al squirt, así que puse a trabajar los dedos, mientras con la otra mano cogía esos pezones , suave muy suave al principio para luego ser más tosco, así, decía ella, mas, pedía muy excitada y en el morbo yo no podía parar hasta que de pronto fghwayugfhwaruigawgyugf, eyaculo! ella se vino! me miraba muy perversa y agitada, me jalo de la mano y empezó nuevamente a chuparme el pene, toda muy salvaje, luego se subió y estaba ahí moviéndose muy rico, luego se puso en cuatro, dame así mi amor, me decía, dame más, mas, mas, su cuerpo y el mío sudaban y nuestros cuerpos chocaban con fuerza, luego se puso de costado y me dijo así dame, yo le seguí la corriente y mientras se lo metía ella gemía, y así hasta llegar al boom! wow! me vine con tanta fuerza y ganas que quede cansado, ella se hecho a mi lado me miro, me beso, y entre besos y besos me dijo, Joaquín me sorprendiste, pero sabes, el día que yo te gane acabara esto, sonreí un poco, dentro de mi decía pero ya te cogí, que delicia de mujer, juntos ahí desnudos en la cama , mirándonos y besándonos, cansados de haber tenido sexo, y satisfechos de placer, pasamos la noche.