Descubierta II

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  -No vuelvas a tocarla- Amenazó alguien justo detrás de él 

Conocía a la perfección esa voz, era ella.

-Expelliarmus-Gritó, haciendo que Voldemort se girará, encarandola, y esquivando el hechizo

-Pero a quien tenemos aquí- Sonrió malvadamente, para luego desaparecer.

-¿Estás bien?- Preguntó tendiéndome la mano

-Claro, y ya era hora de que llegarás- Sonreí- Por cierto, ¿cómo es eso de que te afectaba a ti lo mismo?-

-El día que Bellatrix te torturó, no fuiste a la única- Se levanto el brazo donde yo también tenía aquella palabra- Desde ese día si estamos en el mismo lugar y te hacen daño, siento lo que tu sientes, y me imagino que al revés sea igual-

-¿Papá y mamá?- 

-No lo se-En sus ojos asomaban lágrimas

De repente un grito captó nuestra atención

-Traidores- Gritó- Eso es lo que sois, sabíais quienes eran y lo ocultasteis- Nos asomamos al balcón de la torre y dos personas, con la máscara de mostifagos tapándoles estaban arrodillados- Engañasteis y mentisteis- Les quitó las máscaras- Los verdaderos padres de las mellizas-

Yo estaba en sock, no iba a tolerar que tan cerca de la libertad de todo esto, me quedé huerfana de verdad.

-¿Estás preparada para ver que tal el entrenamiento a Park?-

-¡No!-

-¡PARK!-Grité- Lo siento- Sonreí con inocencia

Un gran dragón de color negro como la ceniza, pero con algunas escamas color verde y rojizas luciendo en su cola y la punta de sus alas, hizo acto de presencia.

-Hagrid ha hecho un gran trabajo contigo pequeño- Lo acaricié, antes de montarme en él-Vamos- Le ordené a mi hermana, haciendo que esta se subiera con miedo-¿Preparada para acabar con esto?-

-¡Si! dijo ¡NO!- No pude evitar reir

-Vamos Park, ¿ves ese hombre cercano a papá y mamá? A por él- 

El dragón fue sin miramientos hacia Voldemort haciendo que el resto se apartara, y en el momento en que Voldemort se desapareció para no ser atacado por Park, haciendo que el resto de mortifagos lo atacaran y el defendiéndose moviendo las alas y haciendo volar a algún mortifago. Pero cuando vio como tenían a Hagrid, la persona que lo tenía preso se convirtió en cenizas.

Nos bajamos de él, a por nuestros padres, los cuales estaban atados de pies y manos, cogiéndolos para llevarlos al Gran comedor, ya que estaban en pésimas condiciones.

Cuando entramos todas las miradas se enfocaban en nosotros, más que nada en mis padres y mi hermana puesto que eran conocimos por ser mortifagos de la confianza de Voldemort.

-Traidores- Siseo Bellatrix-Sangre sucia-

-No vuelvas a llamar asi a mi hija- 

-¿O que Johana? Es una sangre sucia y unos traidores, dejar que mate a la sangre sucia y volver a las filas del señor tenebroso-

-Vale- Dijo mi padre, haciendo que mi madre se quedara de piedra

-Avada....-

-AVADA KEDABRA- Gritó mi padre, matando a una de las mortifagas más peligrosas-No te iba a dejar que cargaras con ninguna muerte- Le susurró a mi madre,  a lo cual ella sonrió

-Hermione, necesito un explicación- Reclamó Harry, el cuál venía con todos los Weasley, Nott, los Malfoy, las hermanas Greengass y Zambini. Todos estaban sorprendidos

-Eeeeh, si bueno-Hablaba nerviosa- Ellos son mis padres y mi hermana- Intenté irme hacia atrás, para escapar de más reclamaciones

-Hermione Atenea Parkinson,¿ a donde vas?- Habló mi madre con una voz que haría temblar a cualquiera, mi hermana se reía- Pansy Hera Parkinson-La reprendió mi madre- Habrá que dar una explicación ¿no?-

-Sí, mamá- Dijimos al tiempo, rendidas

Les explicamos que nos separaron desde pequeñas, haciendo creer que yo era hija de muggles, por nuestro bien y  para prevenir en el futuro, que nos veiamos pero cuando empezamos en howgarts, al volver el señor tenebroso, dejamos de tener contacto alguno. Como mi hermana y yo estuvimos todos estos año viendonos a escondidas, y como por su culpa la familia nott fue asesinada.

-Ni a madre ni a padre les gustaba ser mortifagos, pero me hubiera gustado saber algo de esto, me gustaría que ellos no hubieran muerto, y menos aún mi hermana- Dijo Theo triste

-Lo siento Theo- Se disculpó Pansy a la vez que lo abrazaba, al igual que hicieron mis padres al acabar de dar la explicación

De repente Pansy cayó al suelo de rodillas gritando y después yo. Era la sensación semejante a la de un crucio, pero más fuerte

-Mellizas, esto aún no ha acabado, moriréis y entonces pagareis caro, tanto vosotros como el resto de vuestros seres queridos, lo que habéis hecho. Si sois la salvación del mundo mágico, salir solas y si no lo hacéis morirán más y me aseguraré de que sufran- Una vez acabó, conseguimos levantarnos, y sin ninguna explicación nos dirigimos a las puertas del gran comedor.

-¿A donde vais?- Preguntaron Draco y Harry al tiempo

-A acabar lo empezado- Respondió Pansy

-¿Solas? No, me niego en rotundo- Replicó mi madre

-Lo siento mamá pero tenéis que quedaros aquí, por favor- Rogé para luego abrazar a ambos.

Después de eso Draco se acercó a mi

-Vuelve- Me susurró

-¿Lo dudas?-Le vacilé

-No-

Después Pansy y yo salimos hacia donde se encontraba el innombrable, lo que no esperábamos fue la emboscada que nos tendió

-En ningún momento dije que vendría solo- Gritó riendo

Mi hermana y yo empezamos a lanzar hechizos, aturdiendo y noqueando a la mayoría de los mortifagos que se acercaban hasta que ninguno quiso acercarse.

-Tu te haces llamar señor, Lord, ¿por qué en vez de mandar a morir a otros luchas tu?- Se enfrentó Pansy

-Avada Kedabra- Grito el hechizo

-Protego-

-Expelliarmus- Salió el hechizo de mis labios, haciendo que Voldemort volviera a lanzar su hechizo

-AVADA KEDABRA-

Nagini se acercaba peligrosamente a mi, hasta que Pansy, cogiendo el colmillo del basilisco, en el momento en que la serpiente iba a atacarme, ella se le adelantó, provocando que el último Horrocrux muriera, acabando, al fin, con todos.

Voldemort se debilitó, y esto hizo que mi hechizo llegara a él matándolo. Una vez que él ya no estuvo el resto de mortifagos intentaron atacarnos, pero Park se interpuso, lanzando su fuego, matando a todos, después  tanto Pansy como yo, nos desmayamos.

Lo último que pude oír antes de caer inconsciente fue a mis padres lanzar un hechizo a alguien.






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