Capítulo 4.

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Wheein:

Aquel día no quería levantarme, pero la verdad debía hacerlo, como odio las clases, por mi, dormiría el día entero.

Me levante como pude y salí de mi cuarto, por inercia, aun con mis ojos cerrados. Era costumbre desayunar con las chicas por las mañanas. Cuando cerré la puerta de mi cuarto tras de mi, me tope con Moonbyul. Estaba un poco triste, podía notarlo en su cara.

Me dio los buenos días como de costumbre y como siempre me prevenía de mis mal puestas zapatillas. Algunas veces las traía al revés, ya saben, la derecha en el pie izquierdo y la izquierda en el pie derecho, o los cordones mal amarrados, un total lio, pero ¿como no?, si aun no habría los ojos.

- ¿Cómo estas hoy Moon? – Sonreí.

- No muy bien, pero no puedo hacer nada – Dijo ella un poco preocupada.

- ¿Por qué?... ¿paso algo malo? – Pregunte, ella nunca estaba triste, siempre traía una sonrisa, pero no esa mañana.

- No es nada, solo una tontería – Dijo bajando su mirada, en el fondo sabia que quizás si era una tontería, pero si la hacia triste había que solucionarlo.

Entramos a su habitación y nos tumbamos en la cama. Me explico de su sueño, el sueño donde la chicha entra y acaricia su pelo y la besa en la mejilla, me explico que ese día la chicha la beso en los labios y al parecer le gusto, hablamos un momento sobre eso, sobre que quizás podía ser que le gustara esa chica o que le gustaran las chicas.

Sinceramente es un poco loco, pero jamás juzgaría a Moon por algo así, ella podía ser muy bromista, pero jamás jugaba cuando se trataba de sus sentimientos y los de los demás, pensó que me alejaría de ella por que le gustara una chica pero eso jamás pasaría, ella es Moon... ¡vamos!... Jamás la dejaría de querer por algo así. Intente calmarla y que pensara bien, que sintiera que podía contar conmigo.

La tenia de la mano y mi cabeza estaba sobre su hombro cuando entro Yongsun, y se quedo quieta, de pie mirándonos fijamente.

- ¡Oh!... perdón, no quería interrumpir – Dijo Yongsun un poco incomoda.

- No interrumpes nada, solo hablábamos de... cosas – Dije. No quería comentar lo que me acababa de decir Moonbyul, no era asunto mío decirle al resto, además nada era claro.

- Ya veo...

- Si Yongsun, no es nada. ¿Pasa algo? – Dijo Moon intentando cambiar el tema.

- Yo solo, venía a buscarte para tomar desayuno Moon, y luego iba a buscar a Wheein, pero aquí están ambas. ¿Vamos?

- Si, vamos – Dije.

- Gracias por todo Wheein – Dijo Moonbyul dándome un fuerte abrazo al levantarnos de la cama, pude sentirla un poco más aliviada, quizá hablar sobre el tema la calmo un poco.

- No es nada Moon – La abrase de vuelta. Yongsun aun nos miraba de pie junto a la puerta.

Salimos todas de la habitación y nos dirigimos hacia la cocina. Ahí nos esperaba Hyejin.

- ¡Buenos días chicas! – Dijo.

- ¡Buenos días Hyejin! – Dije besando su mejilla, ella sonrió. Moon y Sun se sentaron en silencio.

- ¿Y estas dos que? – Me susurro Hyejin.

- Moon esta un poco triste y Yongsun... ni idea – Dije encogiéndome de hombros.

- Ya veo... ¿Y tu?... ¿cómo despertaste hoy? – Dijo sonriendo.

- Con mucho sueño Hyejin.

- Cuando no Wheein, si te acuestas demasiado tarde, haciendo no se que – Protesto.

- ¡Ya lo se!....

- Deberías intentar dormir temprano un día, quizás no estarías tan cansada por la mañana – Dijo en un tono de reto, a pesar de ser un poco menor que yo, ella siempre, o casi siempre, tenia la razón - ¿Por qué no lo intentas? – Pregunto.

- Uno de estos días – Sonreí.

- ¿Lo prometes?

- ¡Que si!

- Por el meñique – Dijo levantando su dedo meñique enfrente de mi cara.

- Entiendo, entiendo. Lo prometo – Dije enganchando mi dedo meñique con el suyo.

- ¡Excelente! – Sonrió – No se puede romper una promesa de meñique Wheeinie – Añadió soriendo.

- Ya lo se... Hyejinie – Dije apretando una de sus mejillas.

La conversación continuo entre ambas. Moonbyul y Yongsun seguían en silencio. Sabia que Moon estaba triste o más bien preocupada por lo que habíamos hablado, pero Yongsun, no se que traía Yongsun.

Ya en clases en la universidad, me acerque a Yongsun, quería saber que le sucedía. Durante un momento libre que tuvimos en clases, deje sola a Moon en el puesto y me dirigí donde Yongsun y Hyejin que se sentaban juntas.

- ¡Hola chicas! – Dije sonriendo.

- No puede ser, se acabo la paz de esta sala – Protesto Hyejin riendo, Yongsun sonrió.

- ¡Que va!... si la paz se acabo cuando te levantaste esta mañana Hyejin– Dije intentando devolverle la broma – Pero hablando enserio. Yongsun... ¿te sucede algo? – Pregunte.

- Es verdad, estas muy callada – Agrego Hyejin.

- Solo... estoy pensando algunas cosas, sin importancia – Dijo Yongsun.

- ¿Estas segura que no tienen importancia? – Pregunte - Te vez un poco triste – Añadí acariciando su mejilla.

- Si todo esta bien – Sonrió.

- Puedes contarnos, si necesitas algo Yongsun – Dijo Hwasa abrazándola.

- Gracias a ambas, lo tendré en cuenta – Sonrió.

- Me voy a mi puesto, que Hyejin ya apesto todo – Dije haciendo una mueca de burla.

- ¡Apesta todo por que se me pego tu olor esta mañana! – Grito Hyejin, riendo. Yongsun reía de ambas. Me dirigí a mi puesto y me senté junto a Moon, que era mi compañera de banco.

Moon estaba concentrada, mas bien perdida en su cabeza, dibujando cosas al asar en su cuaderno, la observe por un momento, cuando comenzó a escribir un nombre.

- ¿Yongsun? – Pregunte interrumpiendo.

- ¿Mmm? – Dijo sin mirarme.

- Yongsun, escribiste Yongsun en tu cuaderno – Dije.

- ¡Oh!... no me había dado cuenta... yo solo... estaba dibujando... cosas – Dijo mirando su cuaderno, perdida en su mente.

- ¿Otra vez triste?... ¿Es por Yongsun?

- ¿Cómo sabes? – Dijo mirándome a los ojos.

- Porque haz escrito su nombre al menos unas veinte veces en esa hoja.

- Pues... tal vez... si, supongo.

Moonbyul estaba triste, creía que había cometido algún erro con Yongsun y por eso ella no le hablaba. Intente explicarle que ella solo necesitaba un tiempo y que no se preocupara.

En el fondo sabia que si Yongsun estaba triste, Moon también lo estaría, ambas eran muy cercanas, ambas tenían una conexión distinta a la del resto. No necesitaban hablarse para saber como estaba la otra, se conocían perfectamente.

Mientras dormía (Moonsun)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora