BFF/Daddy - kookmin

Capítulo II

—Jimin....Jimin!....pitufo microbio!!—gritó Jungkook y frunci el ceño.

—que si quieres? Galleta de mierda podrida—dije entre dientes muy molesto por la referencia a mi altura. Soltó una sonrisa de lado y con el dedo señaló a la mujer detrás de mi, la Directora.

—Park Jimin, ese no es un vocabulario que acepte en mi escuela, sabe?— me volví a sentar junto a Jungkook, mirándola suspirar irritado—ni siquiera entrarán mi oficina, no es como si escucharan la charla que les doy sobre el buen comportamiento. Se los he pedido una y otra vez que intenten ser un poco más responsables y aún así llegan tres veces semanales a esta oficina. Ya ni quiero hablarles, sólo vayan a detención y quédense ahí hasta que se el profesor lo diga.

Asentí y me levanté para comenzar a caminar en silencio. No era mi intención haberla molestado tanto, me sentía culpable. Jungkook corrió detrás de mi hasta alcanzar su lugar a mi lado. Sentí su mirada preocupada mientras caminaba, pero preferí mantener el silencio. Llegamos a detención y me senté a mirar al suelo, con las palabras de la directora deambulando por mi cabeza. El pensamiento de "jamás la había visto tan molesta" sólo hacía mi culpa más pensada y asfixiante.

Acosté la barbilla en el escritorio y sentí algo en mi mano. Lo tomé pensando que sería un papel o algo así, pero al tomarlo noté que era un dedo. Eventualmente la mano tomó la mía y se quedó quieta. Sonreí levemente consciente del esfuerzo que significaba para Jungkook dar un poco de afecto físico.

Le miré con una sonrisa leve y mi respondió con la misma expresión, no se necesitó palabras. Volví a mirar al suelo sonrojado y sin soltar su mano para disfrutar el momento. Unos minutos después, soltó mi mano y sentí un vacío. Le reste importancia y me dediqué a hacer dibujos en mi libreta de apuntes. El timbre sonó y el profesor anunció el fin de la detención.

—Es hora de almorzar, dónde quieres ir?—me pregunté y miré a mi alrededor pensativo.

—Campus, bajo el árbol—dije sonriendo. El asintió y bajamos para tomar nuestros almuerzos de la cafetería. Noté las miradas de las chicas dirigirse a nosotros y voltee a mirar a Jungkook, encontrándome con este quitándose la sudadera. Era común que ese tipo de escenas mantuvieran a las chicas ocupadas grabando mentalmente el momento, pero noté que la camisa de mi mejor amigo comenzó a subirse junto a la sudadera, mostrando su abdomen marcado. Me sonrojé y recibí miradas de odio cuando bajé su camisa y el acabó de quitársela.

—Eres nudista o que? Las chicas casi hacen una orgía mirándote—dije empujando su hombro en tono de broma.

—Que lo hagan si quieren, sabes que ellas ni son de mi interés.—dijo enciendo sus hombroa

—A mi si me afecta, contamina mi campo visual!—él soltó una risa y continuó caminando hasta llegar bajo el árbol.

—Jimin, porque no sales con Taehyung? Me han dicho que te mira durante clase—me sonrojé al escuchar sus palabras y negué.

—Es lindo y todo, pero... no lo se, sólo quiero estar con alguien con quien confíe—dije con un suspiro y acosté mi cabeza en su abdomen.

—te seré honesto, Jimin... yo sólo quiero algo sin compromiso... tu entiendes—dijo levemente algo sonrojado y le miré.

—Hay muchas chicas que lo harías contigo como tu quieras.

—pero no me conocen, sería como acostarme con una fan y eso es... extraño. Quiero que sea alguien que conozca lo suficiente como para confiar en que no hará un drama o se lo contará a sus amigas— dijo irritado y solté una risa.

—Si no fueras hetero, yo te haría el favor—dije en tono de broma, pero no escuché una risa y me aterrorizo que estuviera incómodo.

—Y si hago una excepción?— sentí que se colocó sobre mi y mi ritmo cardíaco fue a toda velocidad. Ató mis manos sobre mi cabeza usando sólo una de las suyas y sonrió—aunque soy hetero, se muy bien que eres atractivo, Jimin...

Miré a los lados evitando conectar mi mirada con la suya, mi cara ardía de vergüenza y mis piernas temblaban, pero no forcejee. Su voz era más grave y masculina de lo normal, sus manos más grandes y suaves, sus cuerpo más sexy y su sonrisa más... provocativa

—Hagamos un trato, tu y yo tendremos sexo cuando lo necesitemos hasta que alguno de los dos se canse o empiece a salir con alguien, vale?— dijo sentándome en sus piernas y le miré sonrojado. Sólo asentí nervioso y suspiré.

—una cosa más...— empezó susurrando en mi oído, sacando un jaleo leve de mi parte—

yo seré tu daddy