Jenn

24# El Mundo Es Extraño, MUY Extraño...

Salimos caminando sin mirar hacía atras, respirando el aire de la libertad...

-Gracias, gracias, gracias- Repetiamos con Mia a Lau. No solamente había pagado nuestra fianza, sino que además, no se había enojado por nada.

-Ya ya, volvamos a tu casa y acostémonos que ya son las dos de la mañana.

-¿En dónde está Anne? ¿Y Lisy? ¿Y Jake y Zack? ¿Y el auto de tu mamá?- Miré a Mia. Jake recién estaba con nosotras, y ahora no esta, y ¡EL AUTO! ¡SE PERDIÓ EL AUTO!, y entonces... Mia salió corriendo, espero que sea a buscar el auto, si yo fuese mamá, y mi hija perdiera un BMW, la mato. Pero la mando a un convento si me entero de que fue a un antro con alguien que apenas conocía, casi pierde su virginidad con alguien que conocía aún menos, se metió en una pelea, fue a la carcel, la intento violar un policía, y después perdió el auto. Esas cosas no pasan en la vida cotidiana de una adolecente "normal"...

Pero, de pronto, se encendió una luz de esperanza, ¡EL AUTO ESTABA PARADO A MENOS DE UNA CUADRA DE LA COMISARÍA! Y la luz se apagó, rapidamente, demasiado rapidamente, cuando nos dimos cuenta de que había dos personas dentro del auto, y yo, quise creer con todo mi corazón, que eran dos unicornios que habían venido desde Narnia y por arte de magia cayeron en el auto.

Esa pequeña creencia también se desvaneció, cuando Mia agarró un palo que había tirado en el piso, camino decidida hacía el auto (que tenía música romantica puesta -por Dios, cada vez roban mejor, pero... ¿Estan robando? Emm, parece que no) sacó su celular, abrió la puerta del flamante BMW, y le pegó con el palo a una de las personas en la cabeza, mientras grababa todo, esperen bien ¡SON DOS CHICOS! ¡Y NO CHICOS CUALQUIERA!...

Narra nuestro querido gay, digo, em, Jake.

Salimos caminando muy felices, no era la primera vez que entrabamos en prisión, pero esta vez arrastramos a Jenn, Mia y Anne con nosotros, no era una linda situación, la culpa nos carcomía. Pero nos dejaron de preocupar las chicas -Lau, Jenn y Mia, Anne debe estar intentando algo con la vida- (que por cierto ya se habían ido), cuando Zack me dijo,

-¿Y que hacemos? No creo que Mia se dé cuenta de que falta el auto de su madre.

-Si le llega a pasar algo a ese auto, no nos va a alcanzar el dinero que juntemos en nuestra vida. Mia si que debe tener mucho dinero- Dije más preocupado por mi pobre billetera más que por el CARISIMO auto.

-Vamos, vayamos nosotros a buscarlo- Dijo Zack con una de sus mejores ideas *dios Jenn me pego su sarcasmo excesivo*.

-¿Y cómo quieres entrar?- Pregunté casi en burla.

-Vamos a romper el vidrio y forzar la puerta con un alambre- Dijo demasiado tranquilo.

-Claro y ¿Quién va a soportar a Mia o a su madre después?

-¿Sos o te entrenas?- Idiota, eso te lo tendría que preguntar yo.

-¿Por qué?

-¡Idiota por supuesto que no voy a hacer nada de eso, tengo la llave!- Zack, ALABADO SEAS.

-¿Y de dónde sacaste la llave?- Ahora me dice "Soy mago".

-Se la saqué en el antro, pensaba hacerle una broma pesada- Contestó.

-Bueno este es el auto ¿No?- Señale el BMW que nos venía siguiendo cuando veníamos al antro.

Desactivo la alarma del auto con un botón, y con otro destrabó sus puertas, y yo con un Megane que es manual...

Entre del lado del acompañante y Zack del conductor, todo iba bien hasta que si celular vibró y al idiota manos de manteca se le cayó sobre mí. Yo me moví "sin querer" y el celular de la discordia cayó a un hueco, a lo que Zack no se le ocurrió mejor idea que tirarse arriba mío para tomarlo, y yo intentando prender la luz, prendí el estéreo donde sonaba una música romántica insoportable. Después de esto, todo fue rojo.