Parte 8

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Jordan era el líder de la muy diezmada y ahora debilitada manada Garroway, aún no se recuperaban, de la muerte de su Alfa, Maia Robert, Luke permanecía en una ciudad cercana recuperándose, y Simon, bueno está hospitalizado pronto nacerían los cachorros, su única esperanza, garantizaba la alianza con los Lightwood.

Estaba preocupado, luego de enterarse del regreso de su enemigo, envió mensajes a los alfas de alguna manadas poderosas, esperaba ayuda.

Se sorprendió al ser contactado directamente por Santiago, generalmente quien manejaba estos asuntos era Lily, con quien tenía una buena relación, pero lo que realmente lo dejo si palabras, fue el aviso por mensaje de texto del propio Santiago para acceder a su territorio y más aún verlo llegar por lo menos con 10 fuertes alfas, entre ellos Lily y Kevan, su segunda al mando y el líder de seguridad.

La estrategia fue armada rápidamente, a cada uno se le asignó una tarea, era claro el objetivo del enemigo, así que usarían el factor sorpresa contra él. Lo esperarían en el Hospital, según se enteró Jordan ya existía un equipo de seguridad allí. Raphael era una magnifico estratega.

Solo había una pregunta cuál era el interés de Raphael Santiago, porque quería proteger una manada casi extinta, y porque los Lightwood, no había respondido el llamado.

Un alfa de negra alma recordaba aun saborear entre sus dientes la sangre del joven Simon y el recuerdo de los colmillos clavándose en su piel, era una dulce memoria pero el mayor incentivo era el aroma que emano el omega en medio de la lucha.

Esta bestia obsesiva, en un principio, justo después de matar a Maia, creyó que sería fácil tomara a su omega, y violarlo junto al cuerpo del alfa muerto, para luego dejarlo morir ahí o talvez lo llevaría para que sus hombres se divirtieran con él un poco.

No era la primera vez que recordaba a omega mirándolo fijamente entre los cuerpos muertos, algo en él lo retaba no era la naturaleza de los de su clase.

Al estar cerca lo noto dentro de sí llevaba crías aun eran pequeñas pero le daban valor.

La lucha fue rápida, mordió al omega varias veces, pero pudo macarlo cuando los Lightwood intervinieron, ordeno a sus hombres marcara al chico ninguno lo logro, al final decidieron retirarse.

Era solo el principio, planeo esperar hasta que nacieran los pequeños podría tomarlo y llevárselos garantizando el sometimiento de amabas manadas y en caso de que eso no funcionara, podría asegurarse de que tuviera fuertes cachorros para él.

Apostados en lugares estratégicos, Greyback estaba atento de los movimientos de las manadas Lightwood y Garroway, localizo al joven omega, y ahora que los cachorros habían nacido era hora de atacar.

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Confieso que esta historia se extendió mas de lo que espere

y algunas cosas solo saltaron al papel, pero todo debe terminar,

así que.... esta próximo.  

RESPETADO SEÑOR SANTIAGO (SAPHAEL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora