Glorious ❃ Destiel

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Capítulo 4: "Yo te creo, Dean"

Había días en los que los prisioneros estaban peleando con todos, otra en donde todos se trataban como amigos de toda la vida. Y definitivamente, este día era uno de peleas. En la hora del almuerzo, chocó accidentalmente con otro hombre mucho más alto y fuerte que él.

—No estaba prestando atención, lo sien- —Sin poder terminar de disculparse recibió un fuerte golpe en la cara haciendo que cayera al suelo. Se intentó levantar, poniendo su mano en donde recibió el golpe notando que la sangre comenzaba a salir. Genial, me rompió el labio, pensó Dean.

El tipo pareció enfadarse más al ver la sonrisa burlona que tenía Dean en su rostro. Volvió a darle un puñetazo en el rostro, muy cerca de su ojo derecho. Para ese momento estaban rodeados de varios prisioneros pidiendo pelea como unos niños.

Dean se levantó del suelo y se puso en posición para pelear.

—¿Es todo lo que tienes? —Dean le preguntó al tipo, inmediatamente se arrepintió al comenzar a ser golpeado varias veces terminando en el suelo por tercera vez. Para ese momento, ya recibía fuertes patadas en sus costillas.

Los guardias no tardaron en llegar, sintió que alguien lo levantaba del suelo del comedor. Cuando giró se encontró con aquel rostro conocido, Castiel.

—¿Peleando, en serio? —Castiel lo mantuvo de pie. El otro guardia que lo acompañaba se llevo al tipo que golpeó a Dean a un ligar alejado de todos como castigo.

—¿No debo tener castigo? Yo también estaba peleando —Dean se tocaba el ojo que ahora tenía un gran moretón.

Castiel soltó una risa. —Te llevaré a enfermería, estoy seguro que tu no estabas peleando, Dean. —Comenzaron a caminar hasta la enfermería, y Castiel habló. —Dean.

—¿Hm?

El de ojos verdes continuaba tocando su mejilla, labio y ojo. —¿Podemos hablar sobre lo que pasó hace días?

Dean lo miró serio. —¿Hablaremos de lo mismo cada que nos encontremos, guardia?

Castiel bufo.

—Puedes decirme Castiel, te lo he dicho. Y sí —respondió, mientras abrían la puerta de la enfermería. Dean se sentó en la vieja camilla que estaba en medio de la pequeña habitación y Castiel tomó las cosas que necesitaba para curar a Dean, — ese día en el patio simplemente te fuiste.

Dean lo ignoró. Castiel se sentó a un lado de él y comenzó a pasar varias cosas por las heridas de su rostro, Dean miraba fijamente a Castiel haciendo que el moreno se sonrojara.

—Te haz puesto colorado. —Se burló.

—No, no lo hice. —Mintió, sabiendo que Dean no le iba a creer. —¿Entonces me dirás el porqué estás aquí? —Preguntó. —Prometo creerte.

Dean pareció dudar, pero al final accedió.

—Estoy aquí por homicidio —comenzó a hablar, — pero no he hecho nada. Hace casi 4 años encontré el cuerpo sin vida de mi hermano... Estaba bañado en sangre... —Bajo la mirada. Jamás había hablado de esto con nadie, solo con su abogado y eso porque necesitaba su ayuda. Dean sintió un nudo en su garganta y Castiel al notar su reacción dejo de curarlo, para poner atención. —Mi hermano estaba muerto. Ahí. Solo. Alguien llamó a la policía, según ellos era un anónimo, decían que yo había matado a mi hermano. ¿Yo matar a Sammy, mi Sammy? —Una lágrima escapó y Dean la limpió rápidamente intentado no parecer vulnerable frente a aquel guardia que apenas conocía.

—¿Y ellos creyeron eso? —Preguntó y Dean asintió. Ahora Castiel entendía el comportamiento del chico, desde que el moreno comenzó a trabajar ahí Dean había llamado su atención, siempre estaba solo y no hablaba con nadie, evitaba meterse en problemas. Así que la pregunta que Castiel se había hecho al verlo fue "¿Por qué él está aquí?". Ahora, al enterarse que era por falta de justicia estaba furioso. —¿Cuánto debes estar aquí?

—Debo cumplir mi condena de 10 años. —Murmuró. Castiel lo veía tan indefenso. —¿En serio me estás creyendo o después comenzarás a burlarte de mi patética vida?

Castiel soltó una risa sin burla, —Te creo, Dean. Desde que te vi, te creí.