Corrían adentrándose en el bosque, pero no demasiado. Comenzaba una persecución junto con sus vecinos; un juego de niños, solo que esta vez no todos eran tan niños. Bradley tenía dieciséis años en ese entonces y hace un par de días comenzó a darse cuenta de que _____; aunque tuviera catorce, ya no era aquella niña con la que solo solía jugar desde pequeños, ya no la veía como solo su hermana. Estuvo prácticamente arrancándose los pelos de la cabeza por una semana por la culpabilidad, hasta que se dio cuenta de que ella no era su hermana en realidad.
—¡Por acá!—la jaló evitando reírse, ella perdió el equilibrio y cayó sobre él.
—Lo... Lo siento—dijo ella anonadada mientras se ponía de pie.
—No... Nos encontraran—dijo en un susurro, pero su respiración cada vez estaba más acelerada. La jaló nuevamente hacia él, haciendo que quedara encima de su cuerpo.
—Brad... —dijo ella perdiéndose en los profundos ojos del chico.
—Shh...—la acalló él. Se acercó un poco más, rompiendo toda distancia que había entre ellos. _____ era inexperta con los besos, en cambio Bradley había dado algunos por ahí. Pero sin dudas, el beso con la pelirroja fue el mejor.
—¡Los atrape! —gritó cconnor, quién en ese momento tenía que encontrar a todos los que estaban escondidos. —Oh... Mejor... Mejor me marcho...
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