Capítulo 3

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Entrada triunfal

Desperté, hice mi rutina de todos los días, mi tía llegó y me fui al colegio, al llegar me puse los audífonos y sonó Mad World - Gary Jules ft. Michael Andrews una canción que te permite una entrada triunfal, llegué al lado de las clases ahí estaba él de pie, pero seguí recto y encontré a mis dos amigas apenas me vieron y se lanzaron sobre mí y mi amiga Babi llegó y me dijo: -Hola, vamos hacia abajo, ¿vienes?.

Respondí: -Claro, déjame dejar el bulto y nos vamos.

Deje el bulto y me dirigí hacia abajo con mis amigas dos mejores amigas  Babi y Ronnie y de momento sentí que alguien me llamaba a lo lejos, volví a ver y solamente era una compañera y su amiga que estaba en la misma sección que yo y al momento que la ví hice que no escuché y seguí. Llegamos al gimnasio estaba casi todo el colegio ahí, unos jugando otros hablando, esperamos a que iniciara el buenos días, pero al fin sonó la campana y todos empezaron acomodarse.

Empezó el buenos días duro unos 10 minutos y en eso nos dirigimos hacia las clases donde las primeras cinco lecciones se pasaron rápido. Tocó la campana y me dirigí hacia afuera, no me tocó con ninguna de mis mejores amigas estaba sola en la clase y no le hablaba a nadie pero por fin sonó la campana y vi a mejor amiga Babi estaba afuera con su almuerzo y fuí hacia ella ahí se nos unió Ronnie, pasamos todo el recreo riendo y compartiendo buenos momentos sonó la campana y de nuevo a las clases. La clase empezó y me quede con mi cabeza apoyada al pupitre esperando que pasaran los minutos pero la clase no terminaba, se hizo eterna, hasta que llegó mi profesor favorito y se puso de pie al lado del pupitre y dijo:

-¿Te sientes bien? ¿No quieres ir a enfermería?

-Respondí con un nudo en la garganta. -Estoy bien, sólo es sueño.

El no lo creyó así que me llevo hacia el escritorio y me volvió a preguntar: - ¿Estás bien?

Yo con una lágrima cayendo por mi mejilla respondí: Sí, estoy muy bien.
El se acercó y me dio un abrazo, el siempre lo hacía ya que el sabe muchas cosas sobre mí, lo conozco hace 3 años y se ha convertido cómo en un amigo, una persona con quien puedo hablar y siempre escuchará y tratará de ayudar lo más que pueda. Sonó la campana y él me dijo: -Cualquier cosa hablamos mañana, adiós.

Yo respondí más tranquila: -Sí, gracias.

Me fuí y me dirigí hacia arriba donde siempre me recogían, al parecer el chisme de que estaba llorando en clase no duro mucho en llegar a los oídos de los demás, llegó mi mejor amigo Ale y preguntó: -¿Qué te pasó? ¿Porque estás así?

Hice que lo ignoré y seguí pero de repente apareció él, y se puso frente mí y me preguntó:

-No me vas a ignorar. ¿Qué pasó?

Lo volví a ver. -Nada, ya me tengo que ir, llegaron por mí.

El me detuvo y a su vez dijo: -No te vas a ir hasta que me digas por lo menos que vamos hablar de esto.

Asentí y me fui lo más rápido, busque a Ronnie y nos fuimos directo hacia la buseta.

Llegue a mi casa, me acosté y tomé mi celular y ahí estaba un mensaje de él, no le quería contestar, sabía que sí lo hacía tendría que contarle todo, tendría que decirle la verdad y no estaba preparada para hacerlo, el no sabía lo que había sucedido hace menos de un mes, sentía que era un peso más para él por eso nunca le conté nada, me importaba, jamás dejaría que tuviera una carga más. Y ahí seguía el mensaje, le contesté horas después, desvié el tema hasta que me quede dormida.

Dear, Bad Neighborhood.Where stories live. Discover now