We can make it til the end (Harry Styles)

Capítulo 10

-¿Se puede saber qué te pasa? Si no querías que conociera a tus amigos haberlo pensado antes pero no te pongas ahora así conmigo porque no te he hecho nada.

Aparece Michael que vuelve a su asiento y la cosa queda ahí.

-¿Qué pasa? - pregunta.

-Nada, - responde Harry - nos vamos ya.

Yo no quiero irme pero tampoco quiero aguantar a Harry de morros así que no digo nada.

-Ha sido un placer conoceros - le digo a Michael abrazándole.

-Lo mismo digo, hasta la próxima - responde él.

Llegan también Ashton y Luke, Calum está desaparecido en combate.

-¿Ya os vais? - pregunta Ashton.

-Sí, - digo apenada - me ha encantado conoceros, espero que nos volvamos a ver.

-Eso está hecho - dice Ashton abrazándome.

-Dame tu número y hablamos - me pide Luke, tengo que controlarme para no gritar, Luke Hemmings me ha pedido mi número.

Tras darle mi número y acabar de despedirnos salimos del hotel de los chicos a esperar a nuestro coche. La música no estaba muy alta pero cuando salimos se nota el silencio. Harry llama al chófer para que venga a llevarnos a casa. En el porche del hotel hace más frío que dentro, la temperatura ha bajado y el viento sopla con fuerza. Se me pone la piel de gallina y me abrazo a mí misma para conservar un poco el calor. Harry está un poco adelantado y camina inquieto de un lado para otro, me pone de los nervios pero no digo nada porque la tensión se nota en el aire y no tengo ganas de pelearme con él ahora mismo porque no está nada receptivo.

No me mira ni una sola vez en los veinte minutos de espera hasta que llega el coche. No abre la puerta y me deja pasar primera como hace normalmente, sino que se mete directamente y deja la puerta abierta, así que me meto dentro y cierro de un portazo. No sé qué le pasa pero definitivamente estoy empezando a alcanzar un grado de enfado considerable.

Cuando llegamos a la casa salgo yo primera y empiezo a caminar hacia la puerta sin esperarle. No le miro mientras saca las llaves y abre. Me dirijo directamente a la habitación, subo a la habitación con los brazos cruzados y empiezo a recoger mis cosas dispuesta a irme a otra habitación.

-¿Se puede saber qué haces? - me pregunta.

-¿No lo ves? Recojo mis cosas. No pienso dormir aquí, a no ser que me digas de una vez qué te pasa.

-No me pasa nada - responde.

-¡Venga ya Harry! - no suelo llamarle por su nombre y lo sabe así que sabe que voy en serio.

-¿No puedes dejarlo estar? - responde exasperado.

-¡No, no puedo! Esta tarde estábamos bien y desde el concierto estás raro y borde. ¿Qué ha pasado?

-¿Estás segura de que quieres saberlo? Porque puede que las cosas cambien - ya me harta tanto misterio.

-¡Suéltalo de una vez!

Estamos frente a frente y le miro directamente a los ojos desafiante.

-¡Te quiero Lizzy! - explota - Y ya no puedo guardármelo más. Siempre te he querido, pero no sabía si sentías lo mismo y no podía arriesgarme a decirlo, estaba casi decidido a confesártelo y entonces entré a X Factor y las cosas se complicaron demasiado, era tarde, sabía que debía rendirme pero nunca he conseguido sacarte de mi cabeza. He intentado olvidarte muchas veces, me distanciaba, intentaba estar con otras pero cuando te veo da igual lo que haga porque vuelvo a caer por ti cada vez. No he querido decírtelo porque egoístamente te necesito en mi vida y no podría soportar perderte, pero esta noche cuando he visto como te miraba Luke apenas podía contener los celos, tú eres mía, además en mis conciertos no te emocionas tanto y cuando le has visto has corrido a abrazarle, y luego creía que iba a besarte y sentía como si me revolvieran las entrañas con un tenedor... Y la verdad que ya no sé qué más decirte.

-No hace falta que digas nada.

Tomo su cara entre mis manos y rozo delicadamente mis labios con los suyos, un millón de fuegos artificiales explotan dentro de mí. Bajo por su mandíbula depositando pequeños besos a mi paso hasta llegar a su cuello y luego vuelvo a dirigirme a su boca y le beso de verdad. Harry gime un poco cuando nuestras lenguas se encuentran. Paso las manos por detrás de su cuello y él me acaricia la espalda.

-No sabes cuanto tiempo llevo esperando este momento - susurra cuando estamos frente con frente intentando recuperando el aliento.

-Ojalá lo hubieras dicho antes.

-Tenía miedo de perderte.

-Nunca vas a perderme.

-¿Lo prometes?

-Lo prometo - y sellamos la promesa con un beso.

-Tengo miedo de cómo pueda acabar esto Lizzy... - confiesa.

-No te preocupes, saldrá bien.

-Eso espero. Deberíamos irnos a dormir ya.

-Espera, tengo que hacer algo primero.

-¿El que?

-Esto - vuelvo a besarle.

Nos ponemos el pijama y nos vamos a la cama. Apaga la luz.

-Buenas noches Lizzy.

-Buenas noches Harry.

Me pego a él, no lleva camiseta y rodeo su torso desnudo con mis brazos y acaricio la piel de su espalda. Él también me abraza y me da un beso en la cabeza. Paso despierta gran parte de la noche. No puedo evitar pensar en los pros y los contras de esto, aunque no sé si estamos exactamente saliendo, pero obviamente hemos dado un gran paso. Es lo que siempre he deseado, que me quisiera, aunque nunca me había permitido pensar en ello, antes me parecía un poco inalcanzable, pero cuando surgió One Direction pasó a ser directamente imposible, y más con todas las chicas preciosas que conoce por ahí, en la vida podría haber imaginado que lo que sentía era correspondido. Me siento tan tonta por no haber dado yo misma el paso antes, aunque sé que era demasiado arriesgado, yo tampoco podía arriesgarme a perderle, era una de las personas más importantes de mi vida. Siempre he estado ahí para él aunque en los últimos tiempos él no siempre ha estado ahí para mí. Siempre he ido a sus conciertos en Londres y además me mandaba copias de sus CD's antes de que salieran y los escuchaba una y otra vez echándole de menos, la fama arrancó de mi lado a mi mejor amigo y creía que no le recuperaría nunca. Me encanta verle actuar porque ese es su sueño y él tiene la posibilidad de vivirlo día tras día, pero cada fan nueva y cada nuevo éxito me alejaban más y más de él. En el fondo pensaba que Harry, con el que podía pasarme horas y horas hablando, con el que he compartido risas y llantos, no iba a volver, pero este viaje me está dando la posibilidad de recuperarle, el Harry que me quiere y se preocupa por mí sigue ahí, nunca se ha ido, y esta vez no pienso dejarle escapar.