¡Imaginas 1D & 5SOS!

Ashton Irwin: "Preciosa"

Escrito por: Mi.

"Preciosa"

Estaba sentada en una de las mesas del Mc Donals. Mi mejor amiga me había dejado plantada pues según ella sus padres la habían castigado. Cómo no quería perder el viaje, ordené una Big Mac con una gaseosa y me había sentado a esperarla. Mi vista se perdía en el local y luego volvía a la ventana, contemplando el lindo paisaje de Sydney.

- Hola preciosa - habló un chico haciéndome voltear mi vista hacía él - ¿Cómo es tu nombre?

- Te puedo apostar que “Preciosa” no es - solté burlonamente. No estaba para galanes.

- ¿Por qué tan arisca? - preguntó tomando asiento a mi lado. ¿A este que le pasa? - No importa, me gustan las chicas malas.

- Déjame en paz, no me gustan los idiotas.

- Yo no veo a ninguno - sonrió triunfante.

- Yo tengo uno a mi lado.

- No preciosa, ese no es ningún idiota.

Bufé - ¿De qué forma te hago entender que no me interesas? Y no me digas preciosa.

- Sé que te atraigo, siempre lo hago - hizo una pausa - Preciosa - mumuró esto último en mi oído.  

- Acabas de perder con tu “siempre lo hago” - levanté mi vista de la mesa para contemplar sus lindos ojos mieles… ¿Qué mier...? - Mira… La cajera es una rubia - señalé a la sobre maquillada - Seguro ella cae más rápido que yo.

- No me gustan las rubias.

- Te jodes - sonreí hipócritamente.

-  ¿Me jodes? - levantó repetidamente sus cejas.

Reí levemente, debía aceptar que era gracioso el intento de galan que tenía enfrente.

- ¡Te he hecho reir! - exclamó - Ashton 1 - Preciosa… Bueno tu no necesitas puntos para conquistarme. Ya lo has hecho.

- Oh Dios que cursi - miré sus mejillas, rojitas que tierno… ¡NO. BASTA! - Aww pero que te has sonrojado.

- ¿Yo sonrojarme? - bufó cómicamente.

- Me gusta que se sonrojen - bromeé causando un sonrojo más intenso en el chico lo cual me hizo soltar una gran carcajada.

- Deja de burlarte - hizo un puchero que me pareció increíblemente tierno. Dios tenía ganas de morder aquellos labios rosados y gorditos… Hambre, si eso debía ser - Así que deberé hacer de cuenta que no me fije en que me miraste los labios.

Oh Dios, sentí mis mejillas calientes y volteé mi vista para el espejo donde sorprendentemente se podía ver mi reflejo de lo roja que estaba.

- ¡Te has sonrojado! - se burló - ¿Quién es la rojita ahora? - carcajeó hasta el punto de querer callarlo. Y tal vez era la mejor idea. Me acomodé en mi asiento quedando hacía y él y en un descuido me lancé a sus labios impactando con un dulce y apasionado beso que si no terminaba ahora podía terminar en algo más.

- Tú eres el rojito ahora - dije en cuanto nos separamos -no del todo-, rocé mis labios con los suyos una vez mas, esta mierda era adictiva. Tomé aire para volver a estrellar contra sus pares de terciopelo pero el chico de las ordenes ya había llegado.

Recibí mi orden y Ashton pidió que le trajeran la suya a esta mesa. El resto de la tarde intercambiamos números y prometimos salir otro día. Obviamente cuando nos despedimos fue con un beso como Dios manda, y que beso. Me fui a dormir recordando lo que había pasado con Ashton hoy y… Mierda, el aún no sabía mi nombre.

“- Buenas noches… Preciosa ;)” - Ashton.

Rodeé a los ojos y me dormí con una sonrisa en el rostro. Odiaba el apodo pero tal vez me acostumbraría si lo escuchaba de él… Este no era el fin.

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 Este "Imagina" tiene una segunda parte, algo cómo un epílogo.

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Besos xX