¡Estupido anillo! +18 [Yoonmin][Jimsu]

¡Estúpido sueño! 2/07/2020 Jueves

JiMin

— Ah~ Hy-hyung, duele, p-por... ngh~ favor, nya~ — Estaba atado a la mesa de la sala con una correa mientras era penetrado por YoonGi, profundas estocadas que me chocaban contra la ya mencionada.

— Está mgh~ bien —  Maldición, amo esos sonidos. Era algo extraño que me haya hecho caso bajando la velocidad, aunque eso no duró mucho ya que ahora quería más.

— Yoon-Gi hyung~ m-más, más~ ah~

— Cambias de opinión muy rápido, ¿qué pasa si ahora soy yo quien no quiere hacerlo más rápido? — Hijo de...

— Vamos, tú AH~ bien sabes qu-e también quieres más.

— Tienes razón mñg~ — Subió la intensidad de sus embestidas dándome en mi punto con cada una de ellas.

— nñg~ Y... ah~ Yoon-gi mnh~ me v-engo mgn~ AH~

Entonces desperté.

Moví mi vista hacía los lados para ver si Min estaba despierto, o más bien, si lo había notado, sentía bastante presión en mi miembro.

— ¿Con que soñabas si puedo saber? — Creo... que lo había notado.

— Con nada ¿por? — Señaló hacia la parte baja de mi cuerpo y desvié mi mirada hacia ella... tenía una erección tan grande como imaginé — Oh, no es nada, suele pasarme.

— ¿Cuándo te ha pasado?

— Pues... verás...

— Jimin no me obligues a hacerte decirlo.

— ¿Qué cosa? No hay nada que decir. No estaba soñando contigo.

— Yo no mencioné que hayas soñado conmigo.

— ¿Ah no? Que raro, juró que te escuché decirlo. Igualmente  no sé como me obligarías a... ¡ah!, ¡¿que haces?! — Voltee a ver sus manos las cuales estaban pellizcando mis pezones, los había puesto erectos

— Te obligo a confesar.

— Pe-pero ¡AH! ¡Duele!

— Se pondrá peor si no me dices

— ¡¿Cómo se podría poner peor?! — Los retorcía entre sus dedos y los jalaba.

— ¿Me dirás?

— Me niego, y de hecho, me parece una falta de respe... Fuck — Puso su rodilla a lado de mi pene de manera brusca, pensé que me iba a aplastar, sin embargo hizo algo mucho más placentero. La fue acercando y comenzó a rozarla con mi erección

— Amg~ es-... Mhhg~ — YoonGi reemplazó una de sus manos con sus dientes y su lengua, dolía, pero en conjunto se sentía muy bien.

— Dime que silabas.

— ¿Para qué quieres s-aber?

— Solo quiero que me lo digas, ¿No me tienes confianza?

— No te diré.

Paró en seco con lo que estaba haciendo y se fue a la cocina, escuché el refrigerador abrirse, luego lo cerró y unos segundos después lo vi regresar.

— ¿Qué hiciste? ¿que llevas ahí?

— Nada en particular, solo un pequeño estímulo.

— ¿Qué llevas en la mano?