La primera vez que Joel vió a Erick sus ojos verdes le llamaron mucho la atención, quedó hipnotizado en ellos... pero la magia acabó cuando este se puso a llorar.
Joel odiaba el ruido, y este niño hacía mucho ruido.
Todas las noches el pequeño niño de 6 años lloraba dejando sus ojos verdes con una capa de brillo de lagrimas sobre estos.
Había perdido a su madre en un accidente automovilístico y la custodia quedó para el padre de Joel.
Cuando se enteró de que otro niño viviría con ellos en casa, se enojó con todos. A pesar de que no solía enojarse ni pelear con su familia, esta vez en rizado no pudo evitarlo... un desconocido, otro niño, ocuparía su lugar, un desconocido le robaría su súper héroe, a su padre.
Cada noche que Joel escuchaba los sollozos del pequeño en la cama arriba de la suya, suspiraba con pesadez. Odiaba el ruido, odiaba no poder dormir tranquilo, odiaba tener que compartir habitación con el menor y odiaba no entender de donde salió aquel niño que venía a robarse su vida.
Pero eso ya era cosa del pasado, a medida que creció, Joel entendió por su cuenta quien era Erick, entendió que su padre había engañado a su madre cuando el tenía apenas 2 años, entendió por qué Erick lloraba cada noche por su madre.
El tiempo paso, ahora eran hermanos.
Joel con 15 años se llevaba de maravilla con el ojiverde de 13. Iban al mismo colegio todas las mañanas y por las tardes se encerraban en la habitación a jugar play station, ver netflix y comer.
Su cuarto era un desorden terrible. Su madre los retaba cada fin de semana para que ordenaran su cuarto que cada vez era más pequeño... por el desorden y porque ya no eran niños, eran adolescentes, necesitaban su propio espacio y su privacidad. Patricia les ofreció en varias ocaciones hacer otra habitación pero ambos se negaron rotundamente. No querían separarse, la pasaban bien juntos, no les importaba que su ropa sucia estuviera regada por ahí, la única privacidad que necesitaban era la cortina que cubría por completa la cama de Joel, ya que era la de abajo. Ademas... cuando había que ordenar, eran 2 ordenando solo una habitación, en cambio, si cada no tuviera su habitación, serian uno contra el desorden propio.
Su vida estaba bien tal cual era, hermanastros unidos, un matrimonio feliz, tenían todo lo que una familia necesitaba...
Solo había un pequeño detalle...
Joel tenía un secreto...
Le gustaban los chicos.
Joel era homosexual
Espero que les guste bai
