Almas Opuestas /Pausada/

2-El símbolo (2)

*ZAIRA POV*

Escuché los gritos de Carolina, quien me llamaba para ir a desayunar.
-Ya es muy tarde-dijo.
-Lo sé-respondí.
Uno, dos y tres.-pensé-
Me levanté con pocas ganas,( era lunes, ¿ qué clase de persona sería entonces?) , y puse mis pies sobre el parquet.
Bajé por las escaleras dando saltitos.
-Un día te caerás y tendremos un disgusto. -me riñe Carol.
-Ya...-reí-
Llegué a la cocina, donde nuestro chef, Alberto nos había preparado un rico desayuno.
-Iré a despertar a Edith-nos informó la niñera.
-Genial-contesté.
Unos cuantos gritos más tarde.

-Buenos días-dijo Edith entre bostezos.
-Buenos días-repetí.
Edith cogió una magdalena y se fue.
-¿ a dónde vas?-Preguntó carol entre gritos.
-Donde siempre.-contestó. Supongo que iría a la biblioteca a leer algún libro.

Desayuné y fui arriba a cambiarme. Cogí unos vaqueros y una sudadera negra.
Después se vestirme, volví abajo para montar en el coche.
-Últimamente siempre voy en coche, creo que voy a ie andando-informó Edith muy decidida.
-Estás loca, el cole está a 10 minutos en coche y andando alrededor de 30 minutos-suspiré.
Ella no le dió importancia y se bajó del coche.
-¡Edith!-grité. Me ignoró y continuó caminando.
- Déjala...-Dijo el chófer.
-Está bien.-Contesté no muy convencida.
Por el camino pasamos por la mansión Mager, en ella me fijé en un símbolo que me dejó perpleja y no me dejaba ver del todo.
Me quedé en mis pensamientos.
-Zairaaaaa, Zaira, Zaira...¿ Estás bien?
-Sí-Contesté-¿qué Pasa?
-Ya hemos llegado.

Llegué al Instituto, a primera hora teníamos física con el coco y...a mi sorpresa cuando entré Edith aún no había llegado.
-Pff espero que esté bien...-pensé en voz alta.
-¿pasa algo?-Me preguntó Paula.
- No es nada-mentí.
Me senté en mi pupitre junto con Samuel y la clase empezó.
Cuando Rodrigo pasó lista y escuché que Edith no estaba...Me preocupé más...

Toc toc. Escuché un sonido.
-Hola...¿puedo pasar? -Preguntó mi hermana.
-¿a qué se debe tu retraso?
-Me he entretenido.
-Bien, espero que no se vuelva a repetir. La próxima vez no te dejo entrar y ahora te quedarás castigada en el recreo. Siéntate -ordenó.

El resto de la mañana pasó bastante normal...
Cuando llegamos a casa Edith me contó todo lo del símbolo de la mansión Mager y en la cena Sara y Carolina nos hablaron de ello.
¿cómo es esto posible?
Bueno decidí irme a la cama aunque antes me quedé pensando en porque de repente había goteras en mi habitación.
Un rato después me dormí.